George
Sin responder a lo que dije recurrió a juntar sus labios con los míos. Parecía evadir lo que le decía, así que nuevamente me separé y me animé a preguntar.
—¿Es un sí?— pregunté nervioso, sabía que podía significar muchos cambios para su vida. — ¿Oficialmente seríamos pareja?
—sí, George... era un sí.— rió tímidamente.
Cerré mis ojos mostrándole una enorme sonrisa, dejando caer levemente mi cabeza hacia atrás sosteniéndome de su cintura. De nuevo la miré curioso abriendo únicamente un ojo, aparentemente ella reía por mi reacción.
Arrugué mi frente aprovechando para peinar su cabello desordenado.
—¿Qué es tan gracioso, Horgan?— pregunté con voz más grave.
Mis pies comenzaban a doler por permanecer tanto tiempo de pie a la mitad de la habitación.
—nada... eres demasiado tierno para ser verdad.
Sólo eso bastó para que provocara accidentalmente un ardor en mi cara. Volví a envolver su mejilla con la palma de mi mano acercándola a mí para volver a probar sus labios.
La tomé por la cintura guiándola conmigo hasta un pequeño sillón negro de cuero que se encontraba en el rincón. Me separé de ella para sentarme, mis manos se volvieron a posar en su cintura indicándole que viniera conmigo. Me miró por algunos segundos para después sentarse a horcajadas de mis caderas.
Nos miramos demostrando todo lo que sentíamos con la sola mirada, sentí sus manos frías tocar mi nuca, causándome un escalofrío. Volví a besar sus labios dejando sólo un corto beso, quería seguir admirando lo linda que se veía encima mío. Deslicé mis manos recorriendo sus caderas y glúteos hasta llegar a sus muslos desnudos a causa de su vestido.
La imagen que tenía de ella era perfecta, su vestido azul se pegaba a su cuerpo y su cabello hacía contraste con él. Su piel perfecta brillaba con la débil luz que entraba por la ventana haciéndome perderme en cada lunar. Nadie nunca me había hecho sentir como ella lo venía estado haciendo hace meses, y estaba seguro de que no tenía la más mínima idea.
Tenía la sensación de que jamás llegaría a sentir una sensación igual con alguna otra persona, y eso me asustaba muchísimo.
Una vez más bese sus labios, entrelazándolos y moviéndolos lentamente. Mis besos bajaron hasta llegar a su cuello, alcanzando a oler su rico perfume. Su cabeza cayó hacia atrás enredando sus dedos en mi cabello.
Quité el suéter tejido que aún llevaba puesto para comenzar a besar sus hombros. Y antes de que mis besos pudieran ir más allá de su esternón, levantó mi cabeza chocando desesperadamente sus labios nuevamente con los míos. Apreté sus glúteos por debajo de su vestido provocando que nuestras entrepiernas chocaran peligrosamente, haciéndome soltar un jadeo.
Sentí sus manos bajar hasta el borde de mi chaleco verde comenzando a subirlo para sacarlo de mí. Un poco inseguro acepté levantando los brazos, separándome un poco de ella para que lograra sacármelo por completo, dejándome esta vez únicamente con mi camisa.
Sus labios bajaron por mi cuello provocando que mi cabeza cayera en el respaldo con los ojos cerrados, sintiendo su tacto sobre mi cuello. Apreté fuertemente sus muslos desahogando la tensión que me recorría por el cuerpo completo.
—qué lindos lunares...— pronunció con la respiración entrecortada. Sentí como dejaba besos húmedos por encima de este provocándome que soltara otro jadeo.

ESTÁS LEYENDO
𝐑𝐈𝐕𝐀𝐋𝐒 | D.M. vs G.W.
Fanfiction⁺˚*・༓☾ |❝ Elegir entre dos personas siempre había sido un verdadero problema y dilema, sobre todo cuando estaba mal visto querer tener de los dos al mismo tiempo. ❞ ゚:.。..。.:*・゚゚・*。・:*:・゚★ [𝙸𝚗𝚒𝚌𝚒𝚊𝚍𝚊 - 𝟸1 𝚍𝚎 𝚓𝚞𝚕𝚒𝚘, 𝟸𝟶𝟸𝟷]