Era tan hermoso poder verlo, Kirishima siempre que podía al estar estudiando juntos desviaba la mirada de los libros hacia la dirección de Bakugo, observaba como estaba concentrado en los libros o mirando el celular, el rubio lo reprendía siempre que se daba cuenta, pero aun así lo miraba nuevamente. Ese día Bakugo se había quedado dormido, sonrió, y lo observó fijamente, con el reflejo del atardecer parecía un príncipe y quiso ser valiente para arriesgarse y declararle su amor.
Bakugo abrió los ojos suavemente y miró al pelirrojo que lo estaba observando embelesado.
- Oye ... ¿Qué miras?
- Nada...- se concentró en no mirarlo haciendo como que estudiaba, su corazón latía a mil por hora, era obvio que no podía negar su corazón, Bakugo se había sonrojado también ante esos ojos que lo observaron. Hacía un tiempo que sentía esa energía descontrolada en su corazón cuando sus miradas se cruzaban, sentía el afecto de Eijiro, aunque no se lo dijera sabía de sus sentimientos y él, temeroso, solo los evadía esperando que se disiparan, su corazón se sentía con nudos, era un corazón rodeado de oscuridad por sus temores por sentir un afecto romántico hacia su mejor amigo.
Varios días pasaron de eso, y ahora cada que recibía un mensaje del futuro héroe rojo, Bakugo sonreía sin darse cuenta. Ese día no fue la excepción, al salir al jardín de la UA, Bakugo recibió un mensaje como todos los días de Eijiro, ese decía "Bro, te amo" seguido de otro que decía "Puedo verte". Levantó la vista nervioso sintiendo como su corazón dio un vuelco, ahí enfrente de él a unos pasos Kirishima lo veía sonriente y radiante, no podía negar lo que sentía al verlo, Kirishima por fin se había declarado de una manera tan directa que le fue imposible moverse, el contrario corrió y lo sostuvo en sus brazos, repitiéndole esas palabras del mensaje.
- Te amo Bakugo.
- ¡¿Estás demente?! ¡No digas algo así!
Se soltó de sus brazos y caminó dispuesto a irse, Kirishima bajó la mirada sintiendo como su amor se iba rompiéndole el corazón, pero Bakugo se detuvo, no podía seguir huyendo ya que, aunque tuviera tantos líos en su mente por sus temores ante un amor entre chicos, no podía negar más su afecto y giró nuevamente hacia él, llamando a su pelirrojo favorito.
- Eijiro... Yo también siento lo mismo.
Kirishima sonrió y se dirigió a él tomándole la mano y caminando juntos, fundiéndose en un beso.
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Inspirado en la canción de los Búnkers : "Quién fuera"
Apreciad el arte de la poderosísima Teffy, me encanta. En su fanpage en facebook pueden encontrar el vídeo con estos dibujos y la canción contando esta misma historia del drabble uwu
Pueden hallarla tal cual "Teffysart", no hay donde perderse.
