𝙝𝙞𝙙𝙚 || 𝙖𝙪 𝙬𝙖𝙣𝙜𝙭𝙞𝙖𝙣

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⚠️TW: mención de intento de su*cidio

Después de lo que le había parecido una eternidad, habían dado las seis y media. Él y Wei Ying habían quedado a las siete pero su casa no quedaba cerca del centro por lo que decidió irse media hora antes.

Se dio un último vistazo en el espejo y se sintió conforme con lo que vio. Se había puesto una sudadera sin capucha beis por encima de un jersey negro de cuello alto, estos estaban metidos por debajo de unos vaqueros azul claro flojos que estaban sujetos a su cintura por un cinturón negro, sus tenis blancos de suela alta estaban parcialmente tapados por los vaqueros. Su pelo negro estaba recién lavado por lo que se veía sedoso excepto por algunos mechones los cuales aún estaban húmedos. 

Se colgó su mochila negra a la espalda y salió de su casa despidiéndose de su hermano. Caminó hasta la parada del bus más cercana y se dispuso a esperar. Finalmente, luego de veinte minutos de trayecto en autobús y a pie, llegó a la tienda en la que habían quedado.

Wei Ying ya estaba allí esperando. Como no, llevaba sus Vans, también una camiseta negra de un grupo que Lan Zhan no conocía metida por debajo de sus vaqueros azul oscuro flojos y un cinturón largo negro de tela. Lan Zhan se fijó en que llevaba un collar que nunca le había visto, era de Bakugo Katsuki, cargaba con una bolsa de la tienda en su mano derecha, seguramente un manga que le había llamado la atención mientras esperaba.

—¡Lan Zhan! Justo a tiempo, acabo de salir de comprar esto, ¿nos vamos? —ambos caminaron hacia la dirección opuesta a la que había venido Lan Zhan.

—¿A dónde vamos? —preguntó el alto después de un rato caminando.

—¡Oh cierto! Olvidé contarte todo esto. —los pasos de Wei Ying se hicieron más lentos y miró hacia el suelo—. Mira es una larga historia pero intentaré resumírtela. ¿Sabes quién es Xue Yang?

—Mn. Va a nuestra clase y es cercano a Xiao Xingchen.

—Bien, en realidad los dos somos muy buenos amigos. Él...se podría decir que me salvó la vida —Wei Ying bajó la voz al decir lo último, Lan Zhan lo miró entre intrigado y sorprendido.

—¿Puedes decirlo? Si te sientes mal al contarlo no tienes por qué hacerlo —usó una voz suave mientras lo decía, no quería presionarle a decir algo que le sentaba mal.

—No, está bien, quiero decírtelo. —suspiró fuertemente y empezó a contar—. Fue hace dos años. Intenté suicidarme saltando del puente que hay entre Qishan y Dafan, Xue Yang pasaba por allí y me reconoció. Ese día se hizo uno de mis mejores amigos, aunque la tía Yu nunca lo aceptó por lo que no podíamos estar juntos en clase. El caso es que ese día me llevó a la casa que comparte con sus dos amigos, prácticamente nos acogieron a mi y a dos chicos más. ¿Recuerdas cuando te hablé de mi otro grupo de amigos? Son ellos, quería que los conocieras.

Wei Ying miró a Lan Zhan al no tener ninguna respuesta solo para encontrarlo boquiabierto mirándolo, un destello de miedo le atravesó toda la columna.

—Wei Ying...

—¡Oh mira! Ya casi estamos aquí. —hizo el amago de correr en dirección a la casa pero tiraron de él hacia atrás y se chocó contra un cálido pecho, se relajó entre esos brazos y respiró el agradable aroma que salía del contrario.

—Siento que la hayas pasado tan mal como para llegar a la conclusión de que esa era tu única salida. —Wei Ying se estremeció al escuchar esa voz suave tan cerca de su oído, luego se sorprendió por sus palabras.

—¿Por qué te disculpas? No fue tu culpa, ¿estoy aquí verdad? —su voz sonó en el mismo tono, Lan Zhan sintió como sus ojos se aguaban y su nariz picaba.

—Mn. Yo también estoy aquí —su voz sonaba quebrada pero segura de lo que decía.

Estuvieron un tiempo allí abrazados hasta que sintieron que sus sollozos disminuían.

—Bueno, vamos, los demás nos están esperando. —Wei Ying agarró la mano del alto y lo arrastró hacia una gran casa anaranjada de dos pisos, Wei Ying abrió la verja y Lan Zhan pudo ver que esta tenía un pequeño jardín delantero con un huerto de zanahorias. Ambos entraron y Wei Ying cerró la verja de nuevo.

—Es una casa bonita.

—¿Verdad que sí? Siempre digo lo mismo, adoro esta casa.

—¿Vienes aquí a menudo?

—Bastante, vengo aquí cada vez que me siento mal, es como mi lugar seguro. ¿Has visto los tweets de mis amigos? Cuando dicen que estoy en bares y que no vuelvo a casa hasta días después.

—Sí, muchos dicen eso.

—Nunca he ido a un bar, me dan miedo. Siempre vengo aquí, por eso no aparezco hasta días después, vengo aquí a desconectar y me emborracho con mis amigos o vemos series. —Lan Zhan lo vio asombrado, en verdad había muchas cosas de Wei Ying que no sabía.

—¿Y tus amigos saben eso?

—No, solo Yang y, bueno, ahora tú. —Wei Ying se veía un poco tímido mientras decía eso—. Entremos.

Cuando Wei Ying abrió la puerta, Lan Zhan pudo adivinar fácilmente que, efectivamente, allí vivían varias personas debido a las decoraciones que se veían por la entrada.

—Vamos al salón, deben de estar ahí —recién en ese momento, mientras Wei Ying lo remolcaba hasta el salón-comedor, se dio cuenta de que su mano y la del contrario seguían entrelazadas.

Las paredes de la casa eran de colores variados como marrón y naranja, los muebles eran de distintos tonos de marrón, había diversas fotos y cuadros colgados en las paredes, Lan Zhan se fijó en la pizarra blanca que colgaba en una de las paredes de la cocina. Desvió su vista al salón y vio a cinco chicos mirándolo curiosamente.

—Dejad que me encargue de las presentaciones —Wei Ying se veía emocionado por presentar a sus mejores amigos con el chico que amaba, sin embargo, también estaba nervioso y preocupado por la reacción de Lan Zhan y lo que dirían sus amigos—. Chicos, este es Lan Zhan. Lan Zhan, estos son Sizhui, Jingyi, Zizhen, Xuanyu y bueno, ya conoces a Yang.

—Nos alegra conocerte por fin, Ying nos ha contado mucho sobre ti —Sizhui sonrió cálidamente, Lan Zhan pudo adivinar fácilmente que era parecido a él.

—Sí, espero que nos llevemos bien —Jingyi le sonrió brillantemente, su sonrisa le recordaba a la de Wei Ying.

—Siempre es un placer conocer a gente nueva —Zizhen sonrió tenuemente, parecía tímido pero había un brillo de emoción que lo rodeaba.

—Siéntete como en casa, aunque debo pedir perdón por el desorden, somos un desastre —Xuanyu sonrió con vergüenza, él se parecía mucho a Wei Ying pero su cara era más redonda, sus rasgos faciales eran más suaves y delicados y era más bajo.

—A mi ya me conoces, solo voy a decirte, bienvenido —la voz de Xue Yang sonaba fuerte, sin embargo, su mirada era sincera y agradable.

Lan Zhan le debía la vida a esos cinco chicos, decidió hacer una reverencia para agradecerles.

—¡Lan Zhan!¿Qué estás haciendo? —Wei Ying lo levantó y le miró confundido, Lan Zhan miró a los chicos, los cuales tenían la misma cara que Wei Ying.

—Gracias por cuidarlo —todos se quedaron callados después de eso.

Lan Zhan tenía ganas de hacer otra reverencia, los chicos sonrieron aprobando a Lan Zhan y Wei Ying se enamoró aún más de ese chico.