Doctor

1.2K 117 332
                                    

Pov. Kokichi

Me sentía de lo peor.

La enfermedad estaba avanzando más rápido de lo que imaginaba.

Y creo saber la razón... No he visto o hablado con Shuichi desde hace un largo tiempo.

Y si lo veo es porque está con Kaede...

Siempre lo recuerdo, hay veces en el que Kaede está tan cerca de él que casi parece un beso.

Gracias a eso, los demás los han estado emparejado mucho y hablando sobre "la bonita relación" que serían si fueran pareja.

No me gusta... Y en primera, ¿Por qué debería de gustarme? Estamos hablando de una enfermedad mortal en dónde si vez a tu crush con otro te mueres lentamente. Y de la manera literal.

. . . Cada vez mi mente me traicionaba peor, ahora no puedo dejar de recordar cuando Kaede está con Shuichi. Esas malditas escenas me están, literalmente, matando.

Mierda, de repente siento que quiero vomitar...

Corrí al baño, suerte tenía de estar en mi casa.

Cerré los ojos mientras vomitaba, no quería ver lo que me estaba pasando. Simplemente lo niego.

Niego el pensar que mi enamoramiento me esté matando, niego saber que Shuichi ama a Kaede, niego saber que Shuichi no me quiere de la misma manera que yo, y sobre todo, niego saber que no le importo.

Todos me odian, no me sorprende de que Shuichi también lo haga, después de todo siempre lo he hartado con mis mentiras y juegos.

Esto está mal, mi garganta quema, no sé como describirlo, pero siento como si algo desgarrara mi pecho y garganta.

Al final, sí tuve que abrir los ojos, aunque deseaba que no lo hubiera hecho.

Me encontré, a parte de las típicas flores, un montón de sangre.

Me alarmé, me estaba doliendo la cabeza de tan solo ver esa cantidad de sangre.

Mi garganta cada vez me duele más, todo me da vueltas, el dolor en mi cabeza cada vez se hacía más insoportable...

Tal vez sea buen momento para ir a un doctor.

Como pude me levanté del suelo y, tambaleandome, me dirigí a la puerta principal de mi casa.

Trataba de abrir la puerta, pero era imposible, ya ni siquiera tenía fuerza en mis manos.

Tal vez sea mejor llamar a alguien.

. . .

Pero ¿A quién?

Nadie me creería o se preocuparía por mí y la verdad pienso que ya he molestado bastante a todos como para tan siquiera llamarles por teléfono.

Aunque no tengo de otra, y creo saber a quién puedo llamar sin problema.

Volví a mi cuarto para agarrar mi celular y empezar a buscar el contacto que necesitaba.

Suspiré, agarrando el valor para llamar a alguien.

Amami: ¿Hola? ¿Qué pasa Kokichi?

Kokichi: H-hola... No tan bien q-ue digamos

Traté de reírme para, de algún modo, tranquilizar un poco el ambiente que se vendría.

Amami: ¿Sucede algo? ¿Estás bien?

Kokichi: ¿Podrías... L-levarme al hospital?

Amami: ¿¡Qué pasó!? ¡Ya voy para allá, espera! Estás en tu casa, ¿¡Verdad!?

はなはき (Saiouma)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora