¡LOS HERMANOS, NO SE TOCAN! || Yoontae

Como fue que se conocieron

Todos la veian raro, con sus ojos rojos, su vestido mal acomodado, y sin zapatos, se alejaba de aquel carro y queria llegar a la comisaria lo mas rapido posible, pero con la piedras del asfalto lastimando sus pies eso parecia imposible.

Queria llorar, gritar y odiar, odiar a todos y todo, pero sobre todo a sus padres. Siguio caminando, hasta que su cuerpo choco con el de alguien mas, la persona atino a tomarla en brazos antes de que Taeyeon cayera.

Se sintio en paz, calida, pero no podia dejarse engañar, levanto su rostro viendo al desconocido, quien limpio su mejilla y su lagrima que corria por esta.

-¿Te encuentras bien?

-Parezco alguien que esta bien, ¿seguramente?- un sollozo salio de su boca.

-Necesitas ayuda, ¿puedo ayudarte en algo?- pregunto el joven

-¿Puedo confiar en ti?- pregunto limpiando ambas mejillas.

-Claro que puedes- el joven se quito su saco y se lo coloco en los hombros.

-Porfavor, llevame a la comisaria-pidio en tono de suplica

-¿Que te hicieron?- susurro antes de tomar a la chica en brazos y cargarla, caminando al lugar donde pididio.

Al llegar, la bajo y entraron caminando, todos la veian raro, pero el se encargaba de protegerla, llegaron a un modulo donde pidio poner una denuncia, la secretaria pregunto sobre que y ella respondio de violencia sexual, violencia familiar, fisica y verbal.

Taeyeon habia llegado a su limite y era menor, no tenia a nadie, ni nada.

Un oficial llego y tomo su declaracion, la pasaron con una ginecologa para que la revisara, encontrando desgarre interno en su utero y ano, debido a la violacion, semen seco entre sus piernas, tomando muestras de este para ver y averiguar de quien era, ella dijo que habian sido dos personas diferentes, tratando de describirlas lo mejor posible. Despues de ello, la pasaron a otro consultorio donde un nutriologo la valoro, diciendo cosas de que tenia mala alimentacion y dandole una dieta, finalmente un consultorio mas, un doctor general, que la reviso, le dio pomadas para las hematomas y analgesicos para el dolor que se presentaria en los proximos dias.

Al salir se dio cuenta de que el joven que la habia ayudado seguia sentado, esperandola.

-Quise quedarme para saber si estabas bien, espero no te moleste-.

- No tenias porque hacerlo, pero... Gracias- Susurro Taeyeon mientras bajaba la cabeza

-Yo... Escuche lo que paso con tus padres, no se si tengas algun familiar con quien pueda llevarte- cuestiono el joven.

-Lamentablemente no, pero esta bien, vere que hacer- siguieron caminando en un silencio comodo.

Cuatro cuadras despues el joven se detuvo, tomando por sorpresa a Taeyeon.

-Tengo un departamento... Yo... No lo utilizo, puedes quedarte ahi-.

Taeyeon no supo como reaccionar sin embargo atino a sonrojarse completamente.

-Y-yo, no se... Supongo si- gracias-.

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Los dias pasaron, tan rapido como vinieron, Taeyeon se establecio en el departamento, a unos meses de cumplir 18 ella ya habia hablado con el juez para que se le dejara vivir sola y como apoyo tendria al joven que lo ayudaria.

Ambos se veian, el joven habia ayudado a Taeyeon a obtener un empleo en una zona concurrida, mientras que tomaba clases nocturnas y cursos los fines de semana, tambien asistia a un psicologo el cual le habia ayudado bastante en cuanto al tema de la violacion, diciendo que no era su culpa, con el tiempo se volvio mas cercana a aquel joven quien sin querer le robo el corazon.

Un dia despues del cumplealos 18 de Taeyeon, ambos estaban sentados en la sala del departamento, el joven le conto sovre su vuda y como hacia exactamente un año y medio la madre de su hijo se habia ido, el habia sufrido tanto y todo lo perdio el dia que sus padres murieron en un accidente, dejandolos solos a el y a su pequeño de casi dos años. Taeyeon se sintio realmente mal por todo lo que habia pasado, ambos sabian un poquito de la vida del otro y dia a dia se iban conociendo mas.

A tal grado de que Taeyeon se enamoro, creyendo que seria rechazada por aquel joven apuesto.

Un dia despues del trabajo camino al departamento donde cenaria con el joven, se vio acorralada por cuatro tipos mayores que ella por un par de años. El evento traumatico que habia pasado hace casi ocho meses se volvia a presentar, los jovenes la tocaban sin descaro, mientras la penetraban y besaban, por mas que gritara o pataleara nadie la escuchaba en aque sucio callejon. Despues de que todos obtuvieron su orgasmo la dejaron tendida sobre las cajas sucias, mientras lloraba sin consuelo alguno