Lier Game - Hwang Hyunjin✔️[EDITANDO]

XVIII

Capítulo 18

'Acercarme se está haciendo mucho más difícil, porque me cuesta contener estos impulsos que tengo cuando se trata de ti, ¿Tendré que dejar de fingir para poder tenerte?'

Mi habitación acostumbraba a ser silenciosa, lo único que aveces podía sentir era el ruido que provenía de afuera. Acostumbraba también a parecerme aburrida cada que me encontraba en el interior de esta.

Hoy no.

El silencio estaba siendo sustituido por los chasquidos que hacían nuestros labios fundidos en un apasionado beso.

Ya no era tan aburrida, me parecía tan magnifico que esta criatura que ahora me sostenía con fuerza apegándome a su cuero estuviera encerrado junto a mi.

Estábamos en nuestra propia burbuja, sus manos recorrían mi abdomen a mano abierta y las mías pararon a su cabello quitando la liga que sostenía su coleta, enredé mis dedos en su cabello soltando un jadeo, como si me leyera la mente me guió a una pared y mi espalda impactó contra esta.

Lo quería mucho más cerca y no parecía suficiente, la rudeza de sus movimientos me gustaba, siempre supe que nada con él sería «Romántico», eso no iba con él.

Besé su cuello, mordiendo su piel mientras él escabullía sus manos por debajo de mi sudadera, me llevó hasta la cama donde me lanzó bruscamente, se acomodó entre mis piernas, se arrodilló en la cama mientras yo le ayudaba a sacarse la maldita chaqueta que estorbaba.

Me apoyé en mis codos viendo como se sacaba después la camiseta blanca que llevaba, lo observé, llevaba uno que otro colgante que iba a su estilo, su cabello caía en su cuello y podía ver una leve marca que seguramente había dejado yo ayer.

Con desesperación llevó sus manos a mis shorts y justo cuando iba a besarme de nuevo, la puerta estaba siendo tocada, yo me helé, el solo hizo una mueca de desagrado y atacó mi cuello, alzando un poco mi sudadera para pasar de besar en esa zona, hasta mi abdomen, jalé su cabello con fuerza.

Sonó la puerta de nuevo y eso le molestó.

—¿Que demonios quieren?— preguntó en un tono ronco y molesto que me gustó, solté una risa baja.

—¿Están bien?— sentimos la voz de Yoona— Sentimos un estruendo desde abajo.

—Estamos perfectos— parecía que no le importaba quien fuera el que nos interrumpió, el estaba cabreado y punto— Más que bien.

Volvió acercarse para continuar pero le paré, agradecí que ellos estuvieran aquí porque me di cuenta de lo que estaba por hacer.

—Espera, ¿Y si sospechan?— le susurré.

—Y una mierda con que sospechen— jaló de su cabello con frustración, mis manos se encontraban en su pecho.

—¿Van a tardarse mucho?— preguntó la voz de Félix.

—Fíjate que sí, Y si siguen interrumpiéndonos estamparé mi puñ-  solté otra risa pero lo interrumpí.

—Ya bajamos— sin darle algún tipo de explicación porque esto no la llevaba, solo me puse de pie ignorando el que casi, y por los pelos me dejo llevar por un impulso.

Acomodé mi ropa que estaba demasiado desordenada, mi cara estaba ardiendo y cuando lo miré a él, solo estaba sentado en en borde de la cama con los codos apoyados en sus rodillas, yo lo podría ver a través del espejo en el que me miraba para arreglarme, el soltó un bufido y yo bajé mi cabeza para sujetarla con mis manos.