Fueron en total 27 a aquella expedición.
Actualmente eran solo 13 los presentes. Con Koro-sensei, 14.
- Ya te lo explicaron, supongo.
El de cabellos naranja observó a Nagisa, en quien se apoyaba su brazo derecho. Dio un leve suspiro antes de comentar.
- ¿Te refieres a los zapatos? Sugino se te adelantó.
Además de Maehara, Karma estaba pendiente de lo que diría su amigo.
A diferencia de Maehara, él solo necesitaba estar apoyado en Yoshida y si podia mover la mano izquierda, sin embargo la contraria no reaccionaba.
Nagisa pudo sentir la mirada cobriza en su cabeza, e intento ignorar el ceño fruncido de ambos.
- M-me disculpo, el estado actual de su cabeza es… es mi culpa.
Karma frunció aun mas el ceño, olvidar el dolor que lo atormentaba como si le hubiesen golpeado repetidas veces seguía presente impidiendo que relaje la expresión.
- Vaya Nagisa-kun~ - utilizando el honorífico a propósito - ¿No reconoces una pérdida de conocimiento e intentaste hacernos despertar a golpes?
Las coletas se pararon hacia arriba por el estremecimiento.
- Era broma – sacó la lengua – es bastante evidente, tu solo no podrías cargarnos a ambos.
Todo tenía una clara explicación.
Tras la pérdida de consciencia, la inmovilidad en los otros integrantes, Nagisa se encargó de trasladar a los desmayados. Debido al derrumbe que encerró a Isogai y Terasaka varias piedras pequeñas habia caído del techo de los pasadizos y sus cabezas chocaban con ellas mientras eran llevados a rastras. Dejar a alguien y volver por él después era demasiado riesgoso, por lo que Nagisa tuvo que hacerlo al mismo tiempo.
- Ya van tres que te debo, Nagisa.
Con un peso menos de encima siguieron con su marcha.
- ¿Pero Koro-sensei no podría cargarnos?
- Claro que no. Nagisa, las afectadas no solo fueron Hayami-san, Yada-san y Kurahashi-san? ¿Acaso me equivoco?
- ¿A qué se refiere por afectadas?
A simple vista parecía solo sueño. Eran cerca de las cinco, tenía lógica pero no era solo eso. En los onigiris, deducción de Fuwa, les habían administrado una cantidad de sedante muy alta.
Para buena y mala suerte al parecer solo cuatro personas se vieron afectadas. Yada, Kurahashi, Hayami, la experta en puntería que quedaba, y Koro-sensei.
- ¿No les contaron las buenas noticias?
- ¿Buenas? – Maehara observo confundido a Okajima que se habia metido entre ellos - ¿Acaso hay buenas noticiad?
- ¿Mm...? La verdad solo una, ¿No te percatas que entre todos falta cierta presencia maligna y oscura?
Recién se percató. Hazama no estaba.
- ¡Si! Ahora al menos tenemos la certeza de que más de nuestros compañeros no desaparecerán!
- ¿A qué te refieres Okajima?
- Fuwa nos contó su teoría, que cada uno de nosotros desaparece cuando ella pronunciaba algún número.
De repente Okajima sintió miedo.
- No estás ni remotamente cerca de la posición que te asigne Okajima
Megu lo empujó hacia adelante.
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Terror en la cueva
RandomLa clase E del instituto Kunugigaoka se aventurará en una cueva para compensar la decepción del intento de susto de Koro-sensei. Pero al ser una clase anormal, el conjunto de asesinos se enfrentaran a un enemigo formidable, al que los cuchillos y pi...