No estas, ni estarás sola [libro uno "Todo y Nada"]

8. Secretos

Que día más extraño, solo podía pensar en Nick, estaba arrestado por <fraude entre otros crímenes> ¿Qué se supone que significa eso? Nick no era un criminal, o por lo menos no lo parecía, lo único que podía hacer ahora era esperar, esperar a que lo suelten para poder resolver mis dudas.

Francamente me sentía más confundida que nunca, no sabía en quien confiar ni que pensar.

Finalmente la mañana siguiente Nick fue liberado, realmente me sentía aliviada pero cada segundo que pasaba desconfiaba más de él, no tenía claro porque, solo lo hacía. Después recibí una llamada de parte de Nick, la cual no respondí, el teléfono no dejaba de sonar, tres, cuatro, cinco veces me había llamado Nick, no quería responderle, solo necesitaba procesar todo lo ocurrido; ya cansada de escuchar tanto el teléfono decido contestar.

-¿Hola?- digo cansada

-¡Lisa! ¡Al fin! ¿Por qué no contestabas? Te eh llamado como quinientas veces-

-qué raro, no me había dado cuenta- digo fingiendo indiferencia

-¿Qué ocurre? Estas como extraña- dice confundido

-¿porque te arrestaron?- digo directa

-No es nada importante, son tonterías sin sentido, solo piensa que ya estoy completamente invicto, tranquila que no tendré ningún cargo legal, ya me encargué de eso- dice el con un tono dominante pero sabía que mentía

-Nick te arrestaron, no es poca cosa, y ahora no quiero hablar, estoy muy cansada y mañana hay clase, necesito dormir- digo intentado cortar la llamada

-tienes razón, nos vemos mañana- No respondo y cuelgo enseguida.

Me asome por la ventana de mi habitación, la estrellas brillaban fuertes en el cielo, una noche tan pacifica, tan maravillosa, pero mi cabeza daba vueltas Nick y su extraña habilidad por intentar engañarme, sabía que me estaba ocultando algo, y tenía claro que no me convenía meterme en esos asuntos, era más seguro solo alejarme de él; Me encontraba hundida en mis pensamientos, pero algo llamo mi atención, dos hombres vestidos de negro de encontraban en la mitad del pasto del campus, observando el edificio, parecían como guardias encapuchados, un escalofrió recorrió mi cuerpo al pensar en esos dos hombres observando, vigilando mi edificio, como dos leones preparados para atacar, no me había dado cuanta pero uno de ellos me observaba, unos ojos negros profundo indagaron mi mirada, sentía que conocía esos ojos, no sabía de donde ni como, pero los conocía. Me pase los siguientes minutos observando a los dos encapuchados, hasta que decido levantarme y por seguridad ponerle candado a el cuarto, al dirigirme nuevamente hacia mi ventana los dos hombres habían desaparecido, se esfumaron de la nada, lo que me pareció mas sospechoso aun es que justo en ese instante me llega un mensaje de Nick

<¿no puedes dormir?>

Me extraño y asusto su acierto, como supo eso, no estoy segura, pero estaba segura que esos hombres que observaban mi edificio no significaban nada bueno.

A la mañana siguiente decidí faltar a clases, tome un taxi en dirección a el campo de tiro, disparar armas siempre me había gustado, desde muy pequeña mi padre me enseño, pero cuando falleció mi madre no solía dejarme ir a disparar. En el camino observaba a la gente, hasta que el taxi se detuvo en una luz roja, vi a un hombre de negro, encapuchado con una máscara negra observando en mi dirección, miedo fue lo que me golpeo en ese momento, estaba igual que los dos hombre de anoche; EL taxi se movió en la luz verde y continuamos el camino, al ver por mi ventana a los niños jugar o a las parejas besuqueándose solo me dio una visión tan subliminal de la vida, soledad, las personas necesitan estar con gente, los niños necesitan amigos, los adultos necesitan una pareja para apoyarse y amarse, el ser humano depende mucho de sus relaciones sociales, la estabilidad emocional de una viuda no es la misma que la de una casada, la gente fomenta la felicidad, pero no implica que el sufrimiento no sea parte de eso, un ejemplo de la necesidad de las personas por tener alguien en quien confiar seria, tú mejor amiga te dice que ya no serán más amigas, probablemente de deprimirás, ya que las " mejores amistades" son personas las cuales deben ser fundamentales para tu cosmovisión y para tu estabilidad emocional, por más que nadie es emocionalmente estable, las amistades o parejas son como un pilar de apoyo el cual estabilizara mejor tus sentimientos y emociones, son importantes para que tu vida no sea tan miserable. Después de mi análisis sobre las relaciones de la sociedad me dedique a observar al naturaleza hasta que algo llamo mi atención, el mismo hombre parado junto a un árbol, no lo pude apreciar a la perfección ya que el auto estaba en movimiento pero estoy segura que era él.

Al llegar al campo de tiro salude a Jerry, el encargado de organizar todo aquí.

-¡Parker! Un gusto verte-

-igualmente Jerry-

-¿lo usual?- pregunta él

-hoy quiero la fuerte- digo y me hace entrega de una de mis armas favoritas, una pistola maravillosa, era de mi padre y hace tiempo que no practicaba con ella. Me puse los auriculares y m dirigí al campo de tiro. Estaba posicionada perfectamente apuntando a mi objetivo era golpear el centro tres veces, a la perfección atine todos mis tiros, las armas siempre me encantaron, pero cuando me entere de lo que mi padre y mi tío hacían, me aleje de las armas un tiempo, cuando intente entrar al negocio que antes era de papa, estuve tres años, y aprendí mucho, pero decidí retirarme porque no estaba de acuerdo con sus políticas.

Me pase el resto del día practicando hasta que decidí por volver a mi apartamento, en el camino no había nada que me sorprendiera, pero al abrir la puerta de mi cuarto me di cuenta que él estaba adentro. Nick se encontraba en una esquina a obscuras observándome con una mirada que me producía gran inseguridad.

-¡dios que susto! ¿Qué haces aquí?- digo pegando un salto

-Me has estado ignorando- dice fríamente como nunca había escuchado nadie hablar

-he estado ocupada- respondo ignorando su tono

-¿sabes reconocer a un monstro lisa?- pregunta con una media sonrisa

-¿pero qué dices?-digo confundida

-sabes, eres la única que ve algo más real de mi- dice con un tono frio pero extraño, la verdad nunca me espere que me hablara así

-que mierda quieres-

-siempre a la defensiva- dice riendo con superioridad y un aire frio

-¿de que se trata todo esto?- pregunto extrañada

-tan inocente-

-no me conoces-

-no eres capaz de matar ni una mosca- dice él a lo cual no respondo

-tienes un secreto, el cual no parare hasta descubrir- dice acercándose a mí, saco mi arma y le apunto antes de que esté más cerca

-fuera- digo firme

-eres distinta, sabes mantenerte firme, usar armas y no dejarte caer, lo que me hace deducir que conoces de cerca el lado obscuro de las personas- dice intrigado

-si no quieres ver un monstro te recomiendo irte- digo más fría que el hielo

-interesante- dice dándome una última mirada y saliendo de mi habitación.

Yo tengo un lado que no quiero sacar, cuando trabaje para mi tío me convertí en alguien que no quiero recordar y siento que cada vez sale más a la luz, en especial con el comportamiento de Nick.

Ahí estaba Nick, en la esquina obscura de mi habitación se acerca a mí y me agarra del cuello

-tu merecido linda, por haber trabajado en una mafia- dijo el ahorcándome

Me despierto de golpe, todo había sido un sueño, un simple sueño, cada momento que pasaba más me intrigaba saber qué lo que ocultaba Nick, pero siento que adentrarse en agua de tiburones no era buena idea, Algo tiene Nick que me atrae pero me da un mal presentimiento, cada vez que lo tengo cerca mi cuerpo pone luces rojas, no sé qué oculta Nick Becker, pero ten por seguro que lo descubriré, aunque tenga que nadar con tiburones, Nick Becker no podrá esconder de mi más ese tan preciado secreto.

¡Hola! estoy feliz de escribir, pero no se exactamente como continuara el libro, ¿podría alguien porfabor comentar que le gustaría que ocurriera en esta historia? 

Muchísimas gracias por leer, no te olvides de votar.

La escritora<3