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Tricky: ¡Haaaaaank!
Hank: ¿Hmmm?
Tricky gateó como un gato y se sentó en las piernas del mercenario, este lo miró dudoso.
Tricky: ¿Me quieres?
Hank: Uh..... Claro, ¿por qué preguntas eso?
Tricky: Es que....
El payaso se recostó en su pecho y retiró la máscara de su rostro, dejando ver una expresión algo decaída.
Tricky: Jebus me ha dicho que tú estás conmigo por lástima y para que te deje de molestar :(
Aquello hizo hervir la sangre de Hank, ¿cómo mierda se atrevía ese anciano a decirle eso a Tricky? Apretó los puños furioso y tensó su cuerpo.
Tricky: ¿Hank... Estás bien?
No dijo nada, lo único que hizo fue empezar a acariciar el cabello ajeno.
Tricky: ¿Haaank....?
Hank: ¿Sí, Tricky?
Tricky: ¿De verdad estás conmigo por lástima? ¿No me quieres....?
Hank suspiró y tomó a su esposo de las mejillas, plantandole un pequeño beso en la frente.
Hank: Te quiero mucho, te quiero tanto como mi pasión por matar. Te quiero muchísimo a pesar de no demostrarlo, y aunque muchas veces peleemos o discutamos, yo te sigo queriendo. Jebus es un viejo envidioso porque no tiene a alguien como tú, no le hagas caso.
Tricky se quedó mudo al escuchar lo que dijo, rápidamente su rostro pasó de uno triste a uno lleno de felicidad. Lo abrazó y beso con un enorme rubor.
El nombrado se sonrojó por la reacción del zombie y apretó sus cachetes.
Hank: Te amo, cariño.
Esa frase no fue más que suficiente para que Tricky literalmente estallara de dulzura y entusiasmo. Comenzó a temblar y a correr por todos lados, Hank jamás le había dicho un "te amo". Dió brincos por el sofá, las paredes, las mesas, no podía controlarse.
Hank optó por no hacer nada, tan solo soltó una risita y procedió a observar cómo su esposo explotaba de la alegría.
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