"Castillos de Polvo"

08

Habían pasado ya varias semanas desde que Alastor y sus amigos habían decidido ayudar a Angel, y todos se habían acomodo en aquella encantadora casita, adecuando incluso una habitación para Angel con todo lo necesario en el ático, la cuál una vez había sido pensada y adaptada para convertirse en el estudio desde donde Alastor transmitiría, pero dado el terrible recibimiento de su idea ahora todo su equipo estaba guardado y una cama yacía en el centro de la habitación con todos los aparatos necesarios a su alrededor y un sofá cama individual al lado de este que a su vez tenía al lado una mesita pequeña, esas gruesas paredes mantenían una temperatura agradable todo el tiempo, y dadas las adaptaciones de la habitación todos estaban seguros de que Angel estaba seguro allí. Niffty que tenía una gran vocación para salvar vidas se dedicaba a atender a Angel con gran aplomo, pero su estado era muy delicado y su recuperación sería muy lenta, Husk ocasionalmente la ayudaba aún a regañadientes, pero entre toda aquella dedicación había una que destacaba, pues Alastor jamás se separaba de Angel, se hallaba siempre en el sofá junto a su cama muy pendiente de él, aveces Angel parecía turbarse, como si tuviera un mal sueño, pero Alastor con paciencia acariciaba su cabello e incluso tarareaba para calmarlo, aún si sabía lo delicado de su condición no perdía la esperanza de que un día despertaría y podría de nuevo contemplar el hermoso azul de sus ojos. Aquella mañana igual que todos los días los tres se reunieron a desayunar en la habitación de Angel, pues Niffty y Husk bien sabían que Alastor se negaba a pasar mucho tiempo lejos de Angel por miedo a que despertara y se asustara, Husk lo miró con el ceño fruncido para luego decir:

___¿No te parece que estás exagerando Alastor? No te separas de él más que para lo estrictamente necesario, de milagro sigues duchandote todos los días.

___Oh Husk, no seas tan duro con él, sabes lo que significa para él

___Pues yo no creo en flechazos de cupido, sé que eventualmente nos traerá problemas ¿Siquiera estás escuchando? ¡Al!

___Shhh no grites, y si escuché Husker, ni siquiera yo sé que es, que es lo que me tiene aquí, con esta devoción, solo sé que debo ayudarlo, es algo que no puedo explicar, ni contener, no hay nada de malo en ello.

___No habría nada de malo en ello si no fuera quién es, eventualmente ese mafioso lo va a encontrar y sabes que cuándo lo haga no será amable ¿Porque tenemos nosotros que pagar las consecuencias? Hay muchos de su clase Al, podrías conseguir otro.

___Husker, eres mi mejor amigo y mereces un respeto, pero él también, míralo ¿Realmente crees que él eligió esa vida? Niffty descubrió cosas horribles sobre lo que ese tipo le ha hecho, horrores así no se eligen, nosotros somos esclavos de nuestros recuerdos de guerra, pero por más atroces que sean nosotros los elegimos, nosotros nos enlistamos por propio pie, pero es imposible que él haya elegido esto por propio pie, tan sólo se trata de una flor hermosa, frágil, crecida en el lugar incorrecto.

Husk estaba por apelar pero Niffty le hizo una seña para que callara, pues nunca habían visto a Alastor actuar de esa forma por nadie, aún si él no llamaba ese sentimiento por su nombre era evidente que lo tenía, un sentimiento que ni siquiera él mismo se creía capaz de sentir por alguien, pues muchas veces había desdeñado  el romance narrado en las novelas, pero ahora estaba allí, al pie de aquella cama velando por alguien que apenas conocía, pero que a pesar de ello deseaba ver bien, ver sonreír sereno y feliz. Una vez terminaron de desayunar Alastor se puso a limpiar todo, quería mantener el lugar siempre agradable para Angel, para que así cuándo despertara se sintiera seguro y reconfortado, pero mientras limpiaba quiso hacer el ambiente algo más agradable, así que se acercó a su tocadiscos, era antiguo pero muy bien conservado, luego tomó un vinilo que era de sus favoritos, era el de Vera Lynn, la primera canción que inició era "A nightingale sang in berkeley square" así que se perdió en la suave y romántica cadencia de la melodía, no podía evitar cantar en armonía con la música mientras se movía con gracia limpiando todo a su paso, realmente quería que todo estuviera en las mejores condiciones posibles.