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-Días después-

-Es verdad lo que me estas contando? –Dijo el peli azul sin creer lo que su amigo le contaba

-Yunho, porqué putas te voy a mentir? todo fue real, ella nos llevó a comer helado y luego al parque, es que... Hasta jugó con Yeosang en el resbalador y los columpios!!... Me parece imposible aun –Dijo Mingi jalando sus cabellos

-Lo sé –Dijo el alto aun sorprendido –Mingi... No crees que ella planea algo y por eso es ese cambio de actitud tan repentino?

-No lo sé Yun, todo parece real, sincero de su parte, lo he pensado pero no encuentro una pizca de mentira

-Es complicado... Tal vez sintió pasos de animal grande –Dijo Yunho riendo

-No seas tarado!! Esto es serio

-No era una broma –Dijo burlón recibiendo una palmada por el menor

-Deja de ser payaso que no te sale

-Ya, está bien, solo te diré que cuides tus pasos y pues, en especial de Yeosang, él es el que será más influenciado por la mujer

-No tengo de otra, verdad?

-Deja de hacerte el hijo de puta Mingi, síguele el juego y pues si el cambio es verdadero mucho mejor, solo no te confíes –El menor asintió

-Gracias Yunho, no sé qué haría sin ti

-Nada, porque eres un inútil, Song Mingi –Ambos rieron al comentario

-También te quiero, idiota –Yunho negó mientras bebía de su botella de gaseosa. Una camioneta polarizada estaciono en frente de ambos. Los vidrios bajaron

-Hijo, pasé a recogerte, súbete –Dijo la mujer mostrando una suave sonrisa. Mingi estaba extrañado y Yunho atorado con la gaseosa al punto que parecía que iba a escupir un pulmón

-Ya voy –Mingi sonrió incómodamente pegándole en la espalda a Yunho, este por fin respiro con normalidad sobando su pecho

-Gracias –Susurró el alto. Mingi negó sonriendo divertido

-Hola Yunho, el azul te queda muy bien –Dijo la mujer viendo al alto, este solo asintió con la cabeza –Llévale saludes a tu madre

-Con gusto –Dijo aun en shock

-Adiós, Yunho –Dijo Mingi entrando al auto, Yunho solo voleo la mano y la mujer puso el auto en marcha

-Qué extraño tu amigo

-No me parece

-Lo es –La mujer sonrió con su vista fija en la carretera –Cómo te fue en la universidad?

-Supongo que bien, creo que mejor que antes

-Lo sé, tu padre ya no se estresa por eso

-Trato de hacer lo mejor

-Eso es demasiado bueno, hijo

La mujer detuvo el auto en el semáforo y llevó su mano acariciando el rostro de Mingi con delicadeza, este no dijo nada pues su mente estaba hecha un caos, el tacto de su madre se sentía bien, era cálido. Se preguntaba si así se sentía el tacto de una madre, si eso sentía Yunho cuando su madre lo acariciaba, un sentimiento de calidez se instaló en su pecho y eso no le gustaba, no podía bajar la guardia ni un segundo, cabía la posibilidad de que todo fuera una farsa

-Supongo –Fingió una sonrisa

-Tengo planes para la noche –Dijo la mujer poniendo el auto en marcha

-Planes?

-Sí, vamos a la disco, hijo

-Estás hablando en serio? –Dijo Mingi aun sin creer lo que escuchaba

DesireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora