【 𝐶𝑜𝑚𝑒𝑡𝑒 ¡𝑒𝑠𝑡𝑎! 】↠ 𝑴𝒆𝒘𝒈𝒖𝒍𝒇 !¡♡

Vergüenza.

—¿Mew amigo todo bien?

Tul se acercaba a Mew el cual no había querido salir de su escondite, lo que era ocultar su cabeza entre sus brazos.

—¡Mew!

Ahora Win lo movía de lado a lado.

—¿Qué te pasa hombre?

Bright lo jalo del cabello, y eso obligó al pelicafe a salir a la superficie.

—¡Auch! ¡¿Por qué carajos me jalas así?!—Mew se levantó furioso para or detrás de este.

—Porque ya todos lo habían hecho a las buenas, tocaba a las malas.—hablaba detrás de Win.

—Como sea.

Se sentó de nuevo hundiéndose en su aura de negación.

Todos los presentes se le quedaron viendo.

—¡Mew!

Gritaron todos sus amigos haciendo que el mencionado saltará de su puesto, y el resto de sus compañeros se le quedaran viendo.

—Ugh, los odio...—susurró.

—Ahora si dinos que sucede.—Kao lo miro divertido, era raro que Mew se dejara batear o algo, siempre andaba feliz.

—Es demasiado vergonzoso como para decírselos.

Recordó la mirada de impresión de Gulf esa mañana, pateo sus piernas como cual bebé haciendo rabietas.

—¿A quién le mostraste el pene?

Habló riendo Bright, pero se calló cuando vio que Mew se tensó.

—¡No puede ser!

Gritó después de darse cuenta de aquella revelación.

—¿En serio Mew? ¿Estabas ebrio o algo?—Tul tocó su hombro.

—¡Basta! ¡No le mostré el pene a nadie!

Se levantó deshaciéndose de la invasión de preguntas.

—¿Entonces?

—¡Sólo necesito que saber que hacer para superar algo!

Suspiró agarrándose los cabellos.

—Hablarlo o simplemente ignorarlo.—contestó Win.

—Creo que mejor lo ignoraré.

—Si, espero que todo este bien amigo.—Tul reconfortó.

Las clases continuaban y Suppasit sólo tenía en mente el cómo vería a Gulf cuando llegará a casa.

[...]

New y Mild no habían sido muy discretos que digamos, sólo quería que me tragará la tierra cuando hasta el profesor se nos quedo viendo.

Iba de vuelta a casa entre bromas y tonterías.

—Si tanto te preocupa, muéstrale tú el tuyo—soltó el mayor de repente.

Casi me ahogo con mi propia saliva.

—¿¡Qué demonios?!

New se carcajeo tan fuerte que varias personas que pasaban probablemente pensaron que habiamos consumido drogas o algo así.

—¿Pues si, no?

Volvió a abrir la bocota, parecía decirlo en serio.

—¡No Mild, no! No le voy a mostrar nada a Mew—regañé mirándolo mal.