"Demasiadas confianzas"
-Emmm....bueno lo que quiere decir que estas bueno si...pero que seas bueno es otra cosa, yo no te conozco.
-Pero estoy bueno ¿no?
-Lo siento, pero no.
Este chico es tonto...le acabó de decir que si.
ESTÁ BUENISIMO.
-Entonces....¿por que has puesto que si que estoy bueno?
-Para picar a mis amigas, asi piensan que he tenido suerte al venir nueva a este instituto.
-Oh...
-Si, oh...
-Estoy harto, todavia no te he podido preguntar nada, asi que ahora lo que vamos a haces va a ser apagar los moviles y hablar....¿vale?
Apagó mi móvil y se lo guardó en el bolsillo.
- Hey, no. Lo guardo yo.
Rodó los ojos y me dio el móvil.
-Mmm...vale.
-Bien, empiezo yo, venga.
-Vale.
-¿Tienes novio?
-No. Y tu, ¿tienes novia?
-Nada serio. ¿Cuantos años tienes?
-Voy a hacer los 16 dentro de poco. ¿Y tu?
-Tengo 18.
-Oh.
-Si, he repetido.
-Ya...me parecias algo mayor.
-¿Cuál es tu color favorito?
-¿En serio?
-Contesta.
-Está bien, el fucsia. ¿El tuyo?
-El azul oscuro.
-¿Como el de tu chaqueta?
-Si, justo ese.
Me sonrojé, su mirada era demasiado intensa...esos ojos me encantaban, era un verde muy bonito.
Se estaba acercando a mi...nunca me había pasado esto, del único chico del que habia estado así de cerca era Tom. Asi que mis impulsos me dominaron.
Le di una bofetada en la cara, específicamente en su mejilla izquierda.
Si, en ese momento me entraron ganas de gritarle: "ZAS, EN TODA LA CARA"....pero no le dije nada porque se que le di demasiado fuerte y queria llorar, pero se estaba haciendo el indiferente.
Y como me dio pena pasé mis brazos por su cuello y le aprete muy fuerte contra mi.
Si, le acababa de conocerle, ¿y qué?, si alguien necesita un abrazo yo me ofrecería.
Creí que me iba a aparter, pero en cambio puso sus brazos alrededor de mi y me apretó mas fuerte aún.
-Lo siento, lo siento, lo siento....
-Ya, tranquila, no pasa nada.
-Dios, me siento tan culpable.
-Para ya, me pones de los nervios.
-Vale, pero perdoname.
-Te perdono si te sientas conmigo en todas las clases que tengamos juntos durante esta semana.
-Bueno...vale.
Solo faltamos la primera hora, por lo que no nos regañaron mucho y el resto del día nos tocaban las mismas materias, por lo que estuve todo el día con el.
En el almuerzo, me llevó a su mesa, con los que antes me habían puesto la zancadilla y se habían reído de mi. Les hizo disculparse por haberlo hecho y después se miraron raro entre ellos dos, es como si se estuviesen comunicando con la mirada.
Al final adiviné que se llamaban Sam y Marck.
Bryan era muy directo...por lo que al acabar las clases se auto-invitó a mi casa. Si, así porque sí.
-No puedes venir, mi madre va a venir a recogerme y tu tienes aquí tu coche- le estaba intentando decir indirectamente que no quería que viniese.
-No importa, después puedo venir andando a por el coche.
-Vivo lejos de aquí.
-Si, yo también.
Pues al final me hizo llamar a mi madre para decirla que no me viniese a buscar, que alguien me llevaba a casa.
Me llevó hasta donde estaba aparcado su coche...Oh Dios mio...un Lamborghini...creo que cada vez me cae mejor.
Entonces, al llegar pasó lo que me imaginé.
Mis padres le miraban de una manera (se podría decir) no muy bonita. Pero el sonreía como si nada.
Claro, ¿cómo mis padres creían que quien me iba a llevar era un chico con pintas de macarra?
-Hola familia- dijo Bryan.
¿Pero a este que le pasa?
Buff...demasiadas confianzas.
