Extra 3: Niklas + Hanna - condón = bebé
Niklas
Observo al pequeñito bebé en las manos de Hanna, quien esta rebosante de alegría. Le susurra palabras cariñosas y mi corazón late de forma desbocado. Trago y pongo una mano en mi pecho, tratando de calmar el latir errático de mi corazón. Jamás pensé en un bebé, no hasta que Hanna me mencionó que tenía un bollo en el horno. El miedo de ser como mi padre me asusto durante unos minutos y después fui el hombre más feliz
Massimo Lombardi Richstone
El nombre de mi pequeño. De mí bebé. Mío y de Hanna. Nuestro. Solo nuestro
-¿Niklas, todo bien?-la delicada voz de Hanny llega a mis oídos como la seda y asiento, sin saber que más hacer o como reaccionar ante la felicidad abrumadora que se arraiga en mi pecho-Entonces, acércate. Queremos tenerte junto a nosotros
Me acerco a paso lento, pero decidido. Solo lleva a nuestro lado una semana, tan poco tiempo, y yo lo amé desde el momento que supe que venía. Tomo una respiración profunda y me siento junto con Hanna en la cama, paso mi brazo sobre sus hombros y acaricio la mejilla de mi hijo con la otra mano
-Todavía no puedo creer que algo tan pequeñito sea nuestro-susurra Hanny, con miedo a despertarlo, pero asiento, yo me siento de la misma manera-Es nuestro. Tuyo y mío-susurra con la voz enroquecida por las emociones
Asiento, estando de acuerdo con ella, pero sin decir nada, el nudo en mi garganta amenazando con asfixiarme no me deja articular ninguna palabra. Hanna llevó un embarazo, si bien no complicado, sí intenso. Tuvo náuseas los primeros cuatro meses, y fatiga los nueve meses. Su estado de ánimo cambiaba cada dos segundos, y tenía que andar con cuidado, pues cualquier cosa la hacía explotar en un montón de sentimientos. Desde la alegría efusiva, los llantos sin sentidos y el enojo explosivo. Era como una bomba, buscando cualquier motivo para explotar
Los demás, sabiamente se alejaron cuando Hanna se volvió un poco insoportable, y solo la visitaban cuando ella les marcaba llorando por celular, diciendo que la habían abandonado. No lo hicieron, en todo momento estuvieron al tanto de ella y del bebé, pero yo era su contacto seguro
Pero no importaba, todos esos meses con tantos sentimientos extraños, valieron la pena. Cada jodido minuto fue hermoso. Y lo repetiría mil veces, si pudiera
-Quiero tener dos más, Niklas-suelto una risa por las palabras de mi esposa
-¿Ahora mismo, nena? Prefiero que esperemos unos cuantos años, muñequita
-No pronto. Pero tampoco dentro de muchos años, quiero que Massimo tenga con quien jugar-sonríe de forma exagerada y toma mi mano entra las suyas-¿Te imaginas que tengamos una niña?
La idea de tener una niña, me causa una ternura inmensa y un miedo aterrador. Sé lo que este mundo puede significar para una mujer, pero también sé, que mataría a cualquiera que le hiciera el mínimo de daño. Llevábamos la paz con las demás organizaciones. Incluso tenía un trato de paz con la Corte y la Famiglia, quienes llevaban años peleando por el territorio, dejándonos a nosotros fuera de sus ataques
-Sería fantástico, muñeca-beso su mejilla y ella sonríe satisfecha por mis palabras
-¡Llego el tío favorito!-la voz de Damon se escucha por toda la habitación, ocasionando que Massimo habrá sus ojos azules y hago un puchero, para después comenzar a llorar-Ups...
-Alguien no será el tío favorito-canturrea Lizzie, entrando justo detrás de Damon, se acerca a la cama, donde Hanny trata de calmar el llanto de nuestro bebé
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DESTERRADA [EDITANDO]
Novela JuvenilWillstack City es una pequeña ciudad llena de rumores. A sus habitantes les encanta engrandecer a quien no lo merece y reducir a quienes no hicieron ningún daño. Hay cinco chicos que su poder es inmenso, los rumores los rodean, los halagos y súbdit...