Tiempo de Enamorarse | Draco Malfoy

Capítulo 1

Montserrat Diggory

— ¡Vamos Ced, levántate! —Le grite quitándole las sabanas — Tenemos que comprar los materiales y se está haciendo tarde

Él gruño y se removió agarrando su almohada volviendo a dormir, bufé. Bueno si no quiso por las buenas por las malas será. Salí del cuarto y me dirigí a la cocina para agarrar un vaso con agua, volví al cuarto de Ced y me puse al lado de él

—Buenos días, Bello durmiente—Sonreí vaciando el contenido del vaso arriba de su cabeza.

— ¡Por Helga Hufflepuff! —Se levantó de un salto quedando parado en la cama con varita en mano.

Su cabello estaba mojado al igual que la parte de arriba de su pijama, tenía las mejillas sonrojadas y veía para todos lados esperando a un oponente. Me empecé a reír a carcajadas agarrándome el estómago, él volteo a verme dándose cuenta de la situación

—Muy graciosa—Dijo entrecerrando los ojos, sonrió— ¡Aguamenti!

Un chorro de agua salió de la varita de Cedric hacia mi cayéndome directo a la cara y parte de mi cabello.

—Maldición Ced, ya estaba arreglada—Él se empezó a reír— Estas muerto tejón

Me subí a la cama acercándome, él tratando de librarse de mí se enredó los pies entre las sabanas provocando que se cayera de la cama de espalda al suelo

— ¡Auch! —Me acerque al borde de la cama para ver cómo se agarraba la cabeza mientras maldecía.

—Te lo mereces—Dije sonriendo viéndolo desde arriba, él me devolvió la mirada desde el suelo. Estaba por decir algo, pero un grito de la planta de abajo lo interrumpió

— ¡Montse, Cedric! —Es mamá—Dejen de jugar y bajen

— ¡Ya voy! —Le grite, me baje de la cama y empecé a caminar—Báñate apestoso—Le dije burlonamente desde la puerta.

— ¡Sécate bien!—Grito antes de que cerrara la puerta.

Me toque el cabello mojado bajando las escaleras refunfuñando, mis padres estaban en la sala hablando. Me acerque a ellos, mi madre fue la primera en verme y casi se le salen los ojos

— ¡¿Qué te paso?!—Se puso una mano en el pecho.

—Cedric

Mi padre saca su varita y hace un movimiento con ella, del extremo salió un chorro de aire caliente que se dirigió hacia mí. Cerré los ojos y sentí el aire ondear mi cabello, cuando terminó abrí mis ojos tocando mi cabello ya seco. Madre se acercó con un cepillo en mano

— ¡Genial! Debes enseñármelo—Dije ilusionada mientras mi madre me cepillaba el cabello.

—Para eso iras a Hogwarts, ahí aprenderás muchos hechizos—Me dijo mi padre dándose vuelta hacia las escaleras en donde venía Cedric bajando— Ya era hora

—Lo siento, tuve un inconveniente—Me miró— Parece que ya estas seca—Sonrió.

—Parece que ya no apestas tanto —Me cruce de brazos.

—No empiecen—Nos advirtió nuestra madre—Tenemos que irnos ya a comprar todo lo necesario para su nuevo curso

Cada uno agarró un puño de Polvos Flu y caminamos hacia la chimenea. Primero fueron mis padres y antes que Cedric entrara me adelante, en cuanto estuve dentro lo salude con los polvos en la mano

—Nos vemos luego—Le guiñe un ojo— ¡Al Callejón Diagon!

Un fuego verde me envolvió, la silueta de Cedric se empezó a desvanecer poco a poco y todo se volvió negro. Al abrir los ojos la vista del Callejón Diagon me recibió

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