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capítulo seis. baño de sangre
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LA SÚBITA DESAPARICIÓN DE HAYLEY había provocado que la estancia de Esme se prolongara tanto como no había esperado. De alguna manera habría pensado que no habría ningún problema y que todo empezaría a suavizarse, pero parecía menos probable. Esme planeaba ayudar a Elijah y Klaus a encontrar a la licántropo, y tenía prisa, lo que significaba que estaba agitada y temperamental, lo que dificultaba la comunicación con ella y hacía que su paciencia se agotara. Klaus creía que Marcel tenía algo que ver con la ausencia de Hayley en la plantación, ya que había visitado la mansión de la que se suponía que no sabía nada, pero descubrió la mentira que le dijo Mikaelson. Los tres creían que Marcel se había llevado a Hayley sabiendo que no confiaba en los Mikaelson y sabían cómo a veces se manifestaba su curiosidad.
Gerard estaba involucrado en la diversión que sucedía en medio del complejo con sus vampiros que inundaron Nueva Orleans, todos los que se reunieron para luchar por un anillo de luz diurna. Las noches de peleas de vez en cuando lo sorprendían y ver a Felicia pelear contra un vampiro dos veces más grande que ella, Otto, donde había logrado romperle el cuello llevándola a la victoria y las posibilidades de recibir un anillo de luz diurna, ser un nocturno era interesante pero caminar en el la luz del sol iba a ser mejor para ella.
—¡Whoo! —Marcel aplaudió a la chica que estalló en una sonrisa de victoria—. ¡Mujer! —Estaba dispuesto a concederle el anillo de luz del día que ella había estado esperando tener, pero antes de que pudiera, su cuello se partió.
El cuerpo inerte de Felicia había caído frente a las botas propiedad de Browne, cuya repentina invasión había provocado que el estado de ánimo de todos cambiara a la curiosidad y el interés de la vampiro parada en medio del círculo que habían formado para ver la pelea que había sido interrumpida. Los vítores que se habían hecho eco en todo el recinto y habían cesado no estaban tan contentos con la llegada de Browne. —¿Estás bien, Marcel? —Esme cuestionó mientras sus manos descansaban en sus caderas con una sonrisa forzada—. Es un gran club de lucha el que tienes aquí —Cuando arqueó las cejas, Marcel pensó que Dylan estaba de uno de sus estados de ánimo, con el que sabía que difícilmente podía cooperar.
—Buenas noches —El paso de Klaus para unirse al lado de Esme había provocado que los vampiros que los rodeaban se pusieran rígidos en su lugar. Luchar contra Esme y un Original causó menos posibilidades de supervivencia—. Quisiera decir algo.
Marcel miró a la pareja, odiando el repentino choque de diversión. —¿Qué creen que están haciendo aquí? —Cuestionó.
Elijah había emergido a través de los vampiros. —Parece que hemos interrumpido la diversión de un montón de aficionados —El vampiro se había asegurado de abrir un camino para que el original del traje pasara y se uniera a su hermano y al lado de Esme—. Hemos venido aquí por la chica. Entrégala, o... mataremos a todos aquí. Empezando por ti.
