Waisen © [Completa]✓

Marlen Wilbur

1:00 am

Y ahí estábamos Zack, André y yo a punto de entrar al bosque que te lleva a la perdición total.

—Vamos Zacky... Entra —empujó André al rubio mientras alumbraba con la linterna a uno de los árboles.

—¡No me llames Zacky! ¡Solo puede llamarme asi Laily! —protesto Zack mientras daba un paso al frente, pero se detuvo rápidamente al escuchar una ramita rompiéndose. Esté pasó saliva con dificultad y miró a André
—¡Anda pasa tu primero que pareces parásito ahí pasmado como idiota! —empujó Zack al castaño hacia el bosque.

André se detuvo con todas sus fuerzas y negó con la cabeza.

—No, pasa tú —lo volvió a empujar.

—¡No, yo no!

Y así es como los dos comenzaron a empujarse hacia el bosque sin parar, mientras se gritaban. Puse los ojos en blanco, tome mi linterna y di el primer paso dentro del bosque.

Estaba oscuro, la luz de la luna verdaderamente no ayudaba, pues la neblina cubría todo. Nunca en mi vida había estado tan cerca del bosque, pero realmente... Sentía que si. Aún que no era verdad.

—¡Entra tú primero!

—¡No, entra tú bicho raro!

—¡Los parásitos tienen más futuro que los bichos, así que entra tú!

Los dos me voltearon a ver y abrieron los ojos como platos.

—¡Layla! —llamaron los dos en unísono, mientras se sostenían los brazos por empujarse.

Me gire hacía ellos y los mire con mala cara —: ¿Quieren dejar de comportarse como si tuvieran la edad mental de cinco años? —pedí bruscamente.

Los dos chicos me miraron como dos cachorros regañados y asintieron suavemente con la cabeza. Me giré nuevamente al bosque, y esforcé mi vista para poder ver algo más allá de la neblina y troncos a lo lejos.

«Layla»

Di un paso atrás torpemente y caí de nalgas al suelo. Zack y André me levantaron rápidamente y preguntaron que había pasado, yo negué con la cabeza y tragué saliva.

No creo que se bueno estar aquí.

—Deberíamos irnos de aquí —dije en un susurró.

—Yo también lo creo, se que voy llegando, pero este bosque me transmite desconfianza. —comentó André.

—Vaya ¿ahora eres un brujo que recibes las malas vibras o que? —pregunto Zack burlón y con mala cara.

—¡Cállate idiota! Ahora Layla está mal, deja de decir tonterías.

Zack me jalo hacía él —¡¿Tú qué sabes de su salud?!

—¡No necesito conocerla desde que fue un feto, como para saber que está mal! —André me volvió a jalar hacía de su lado.