ESPECIAL

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Del elevador salió un esbelto chico que como siempre, con esa cabellera roja y atuendo demasiado sexi se robaba la mirada de todos en la oficina. Ya era común verlo llegar como si nada y pobre de aquel que le prohibiera el paso, si ni siquiera el mismo dueño de la empresa se atrevía a decirle algo.

-Joven Jung, buen día... - Una señorita se puso de pie para hacer una leve reverencia.

Los demás trabajadores comenzaron a hacer lo mismo. Algunos incluso se atrevían a ver más de la cuenta, claro que disimuladamente si no querían quedarse sin empleo.

-El prometido del señor Min es demasiado joven y sexi, ¿no crees? - Dijo un hombre ya de apariencia vieja comiéndose con la mirada al chico que acababa de pasar.

-Dios, no sueltes comentarios tan a la ligera, ¿no tienes miedo de que el jefe te escuche hablar así?

Los dos se quedaron en silencio después de pensar en la posibilidad de que Yoongi los escuchara y un escalofrío recorrió sus cuerpos. Fueron inteligentes, así que se olvidaron del pelirrojo y continuaron su trabajo.

Hoseok caminaba tranquilamente mientras sonreía hacia la oficina de su adorable novio, ignorando a las personas que comentaban sobre él y lo miraban.

Su sonrisa se borró cuando vio a Kim Taehyung en el escritorio fuera de la oficina de Yoongi, coqueteando con el secretario. - ¿Te pagan por hacer esto? Le diré a Yoongi que solo vienes a hacerte el tonto y no te dé ni un solo peso.

Taehyung abrió sus ojos sorprendido y se enderezó, cuando se dio la vuelta se encontró con Hoseok. - Tú, ¿qué haces aquí? El señor Min está ocupado, deberías dejar de joder...

-Y tú deberías ir a sacar copias o algo, que es para lo único que te necesitan aquí. - Se burló. - Todavía me parece chistoso como es que terminaste trabajando para Yoongi y quedaste en la ruina.

-Gracias a la perra de tu madre. - Soltó Taehyung, con la sangre hirviéndole de ira al recordar lo que había pasado hace cinco años.

El comentario hizo molestar demasiado a Hoseok. A pesar de que su madre lo hirió de mil maneras con despreció y palabras crueles, no dejaría que un bastardo como Kim Taehyung la insultara.

Iba a hablar pero justo en esos momentos la voz profunda de un hombre se escuchó. - Kim Taehyung ¿Estas molestando de nuevo a Hoseok? - Yoongi había salido de una reunión y se apresuró a ir a su oficina ya que sabía que a esa hora el menor llegaba a verlo. - Te he dicho que no quiero que respires en el mismo espacio que él, ¿no entendiste?

Taehyung tensó su cuerpo. - Lo siento señor, solo estábamos hablando. - Hizo una reverencia y luego se fue molesto a su lugar de trabajo, exactamente alado de la fotocopiadora.

- ¡Mi amor! - Gritó Hoseok alegremente mientras se aventaba a los brazos del mayor. - Creí que estabas adentro, ¿no fuiste muy grosero con Taehyung?

- No, solo me gusta molestarlo. - Se rió. - Además si no lo corría estoy seguro de que lo hubieras golpeado. - Respondió Yoongi algo tenso por las miradas de sus trabajadores. - Vamos adentro...

Hoseok asintió y siguió a su novio.

Ya adentro, Yoongi se quitó el saco y se sentó en un sofá, Hoseok se sentó en las piernas del mayor ignorando que había suficiente espacio de sobra alado y comenzaron a besarse como si no se hubieran visto desde hace mucho tiempo.

Sus labios comenzaron a moverse sin perder tiempo, enredaron sus lenguas sin pudor y entre sonrisas, Hoseok se puso a horcajadas sobre Yoongi para comenzar a moverse en un suave vaivén. Por supuesto, no pasó mucho tiempo para que sintiera el duro pene del mayor frotándose entre sus nalgas.

Daddy give me more ~ [YoonSeok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora