To be loved [KTH&JJK]

X - choosing you

Taehyung aprieta fuertemente los ojos antes de buscar a tientas su celular en la mesita de noche, intentando no moverse demasiado, ya que Jungkook tiene la cabeza recargada en su hombro y sus manos hechas puños se aferran de la playera que utiliza para dormir.

No había dormido así de bien en meses. Se siente renovado y con algo en su pecho que lo hace sentirse pleno.

Son casi las once de la mañana, bastante tarde para lo que está acostumbrado a despertar, pero nada es más importante que pasar tiempo con su omega. El alfa acerca su nariz al pelo de Jungkook, solo captando la esencia del champú de Jimin, quien vino el día anterior a ayudar al menor a asearse.

Taehyung se agacha hasta que su nariz toca la mejilla del omega y frota despacio hasta conseguir que este apriete los ojos antes de afianzar más su agarre en la playera del alfa.

—Amor— susurra Taehyung con dulzura, poniéndose de costado para poder llevar su mano desocupada a la espalda de Jungkook y frotarla—, bonito, necesito levantarme a preparar el desayuno.

El omega abre despacio los ojos, apenas sonrojándose en la cumbre de sus pómulos. Su corazón late de manera descontrolada aunque sabe que Taehyung lo dice para hacerlo sentir mejor, no porque sea una verdad.

—Hey— repite el alfa al sentir malestar por parte del menor que solo lo observa, con sus bonitos ojos bien abiertos, pero que no sabe entender, pues estos solo brillan, solo un poco—. ¿Qué pasa, mi amor?

Jungkook baja la mirada al escuchar el apodo.

No.

Él nunca será algo de nadie. Su madre se lo repitió muchas veces. Jungkook nunca sería alguien lo suficientemente importante para otra persona, pues él es un castigo para quien lo conozca, una gran pesada carga.

—No te preocupes por mí, no tengo hambre— susurra mientras empuja con la poca fuerza que tiene el cobertor para salir de la cama. El malestar en su marca se intensifica, pero en este punto ya no distingue qué le duele más.

El sonido del celular debajo de la almohada de Jungkook detienen al alfa de salir de su cama. Taehyung mira cómo el omega respira unas cuantas veces antes de poner su mejor sonrisa.

—Hola, princesa— dice Jungkook al contestar la llamada y alejar el celular para ver a su hija—. ¿Cómo estás?

—Hola, pá. Mira, tío Hoba nos trajo al parque— la niña enfoca a los dos adultos, quienes están sentados sobre una manta y ambos intentan ocultar la preocupación al verlo—. Estaba jugando con mis nuevos amigos, pero se tuvieron que ir. Te extraño.

—Yo también te extraño, espero vernos pronto.

Sunhee chilla con entusiasmo, recargándose en Yoongi, quien le deja un beso en el pelo.

—¿Vamos a mudarnos?

Jungkook mira al alfa junto a él levantarse de la cama y caminar hacia su vestidor, dejándolo solo.

—¿El doctor Kim va a ser mi papá?— Yoongi la regaña en voz baja, ocasionando que el omega deje salir una risa triste cuando Sunhee parece ignorarlo y sigue preguntando—. ¿Es tu alfa? ¿Es el lobo especial del que siempre me hablaste?

—Basta— dice Yoongi con suavidad, quitándole el celular a la niña para dárselo a su alfa—. Jungkookie, iremos a comprar un helado, te queremos— el omega lo escucha a la lejanía, mirando a Hoseok, quien tiene una rara expresión en el rostro—. ¿Te sientes bien?

El menor asiente.

—Hoy te inducen al celo, ¿no?— Jungkook vuelve a asentir. No se siente capaz de contestar sin comenzar a llorar— Vas a estar bien, tu alfa se tiene que asegurar de ello. Llama si necesitas algo.