Colapso

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Los tres días habían pasado más que rápido...

Mingyu estaba mirando desde su auto la llegada y salida de muchos aviones al aeropuerto; si no mal se equivocaba, Wonwoo llegaría en el último de la noche a las diez de regreso.

Faltaban treinta minutos para eso.

Miro de nuevo hacia arriba y visualizo uno de los aviones llegar. Suspiro dejando salir el aire que lo tenía en preocupación desde que lo vio por última vez.

Esperó dentro del auto y salió cinco minutos después de ver a Jihoon, el compañero de su chico.

Miro a Wonwoo a lo lejos con una maleta en manos y sacando su teléfono.

Caminó hasta él, lo tomó del brazo y lo llevó hasta su auto.

—¿Qué haces aquí?

—Vayamos a nuestro apartamento.

—Tengo que llegar a mi departamento, estoy cansado. Mingyu, hoy no

El alto asintió, abrazando al chico que se sentía tenso.

—Entonces solo vayamos y pasemos el rato cenando.

Wonwoo asintió metiéndose al auto.

[...]

—¿Ya tenías la cena preparada?

—Sí, algo a sí —el alto dejó la maleta en la sala y acompañó a Wonwoo hasta el comedor.

—¿Cómo te fue?

—Estuvo complicado, nos tomó por sorpresa una tormenta en las costas, pero lo hicimos bien, sobreviví otro día.

Mingyu tragó asintiendo.

—Wonwoo, no necesitas trabajar, tienes este apartamento; yo puedo darte lo que necesites para que estés bien aquí y si quieres darte algún lujo también.

Wonwoo sonrió negando, mientras cortaba la carne y alzaba una ceja;

—¿Para qué? Para que me reproches que todo lo que soy y tengo es gracias a ti, no Mingyu, yo ya tengo suficiente con ser la puta barata que puedes encontrarte en cualquier esquina de camino a casa.

—Sobre ese día, lo siento.

—Claro que lo sientes, siempre lo sientes.

—Wonwoo

—¿Bebiste cierto?

—Un poco

—Esto era demasiado mágico para ser cierto; en cuanto se te baje el alcohol de la sangre estarás gritándome las mismas cosas de siempre, así que preferiría que te fueras en cuanto termine de cenar; no me siento bien y estoy cansado para lidiar contigo.

—¡Won!

—Won, no, Mingyu, por favor, pase unos días fuertes, ya solo quiero descansar un poco y enfrentarme a mi realidad después.

[...]

Mingyu no recibió llamadas ni mensajes la última semana después de la cena de noche, por el viaje que estaba retrasándose...

Wonwoo había viajado de nuevo de ida y vuelta, pero el pronóstico de tiempo lo estaba reteniendo mucho.

Se levantó en medio de la noche, eran las cuatro de la mañana y suspiró. Tomó su teléfono, marcó el número del menor y de nuevo.

"Estás llamando al número de Wonwoo, por el momento no puedo contestarte, por favor, deja tu mensaje".

—Wonwoo ¿Estás bien? Dijiste que solo serían dos días, llevas cuatro y las condiciones climáticas están severas; por favor, comunícate conmigo cuanto antes.

Apagó su teléfono y volvió a la cama, sentándose en ella, mirando los impresionantes rayos cayendo e iluminando la habitación obscura.

Escuchó unos toques en la puerta y se asomó viendo a su pequeño.

—¡Papá, tengo miedo! —lo cargo y lo abrazo para ponerlo en sus piernas y cubrir sus orejas mientras lo meneaba de un lado a otro tratando de calmar sus miedos.

—Papá siempre estará aquí y cuidará de ti

—Te amo Apa.

—Te amo más, mi pequeño bebé.

El inmenso trueno hizo retumbar la casa por lo fuerte que fue.

Ambos se asombraron; Mingyu buscó el control de la televisión y buscó el canal de noticias para dejarlo encendido y quizá poder conciliar el sueño.

[Quince días después]

Mingyu estaba saliendo de una de las juntas en la empresa y camino hasta su oficina.

El teléfono comenzó a vibrar en su pierna y lo sacó de este.

¿Wonwoo?
Hola, solo quería decir que estoy de vuelta, siento no contestar antes, pasaron cosas durante el viaje y necesitaba concentrarme mucho.
Está bien, ya no importa.
Supongo, bueno, hasta luego
Sí y me alegra que estés de vuelta —contestó tajante y apagó el teléfono.

Posó su vista de nuevo en su computadora.

Seungkwan junto a Jun y Seungcheol entraron a su oficina.

Mingyu los miró tirando de una de las fotos de su escritorio para que no pudieran verla.

—¿Interrumpimos?

—No, adelante, tomen asiento ¿Qué pasa?

—¿Vamos a un bar esta noche? Morimos de ganas por beber un poco.

—Claro, en una hora salgo

—Bien, Chan irá también, le diré si lleva a sus amigos de la noche pasada —mencionó Seungkwan.

—Oh, sí, por favor, necesito ver al jovencito. Wonwoo

—¿De verdad te gustó el amigo de Chan? —cuestionó Seungcheol.

—Sí, saben, es muy diferente sentirte atraído por alguien físicamente a algo más allá de eso; Wonwoo tiene algo que gusta mucho, un encanto peculiar aparte de su monolido físico que es lindo y eso lo hace perfecto.

Mingyu asintió mirando a Jun mientras sentía los celos recorrer su cuerpo.

—Bueno, nos vemos en una hora, por tanto, tengo que trabajar y ustedes deberían hacer lo mismo.

—De hecho sí.

—bueno vamos.

Mingyu los miró partir y levantó de nuevo la fotografía de Wonwoo.

Te amo —susurró para sí mismo mirando la fotografía.

Sober (Meanie) MINWONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora