VI. Orquídeas.

1.7K 144 82
                                    

Aunque en el taller se escucha el ajetreo embrolloso de los motores, de herramientas que chocan las unas con las otras, de una música local que es pobremente percibida debido al volumen tan bajo al que se reproduce, nada allí puede derrotar a la habladuría constante de Harry.

Parece que ha estado hablando por lo que ha sido el día entero, pegándose a Zayn al ayudarle en sus tareas y moviendo la boca sin parar sin siquiera molestarse cuando ha estado debajo de un auto al tener que arreglar una fuga de aceite del mismo.

Así que cuando la hora del almuerzo llega, el pelinegro cree tener una oportunidad para descansar momentáneamente del parloteo desmedido de Harry estando recargado en una de las jardineras de la parte trasera del local, siendo que sus esperanzas se esfuman rápidamente cuando el ayudante se acerca a él con una amplia sonrisa que parece que le va a partir la cara en cualquier instante.

Con esos rizos chocolate que están peinados y arreglados para que no le caigan en la cara al momento de trabajar, y con esa piel lechosa en su cara que en este momento tiene varias manchas de grasa regadas por ella que sin embargo no le quitan encanto alguno al muchacho.

—¿Ya te mencioné que a Louis también le gustan estas barras de granola? —pregunta el rizado una vez llega hasta su amigo y puede señalarle una parte de su propio desayuno. Un envoltorio rectangular que no tiene nada de extraordinario y precisamente se trata sólo del alimento que ha mencionado en la comparación de gustos con el ojiazul. —Es una linda coincidencia, además, me da material para hacer un par de bromas con eso y molestarlo un poco.

Zayn entrecierra los ojos y traga el bocado que ha masticado del emparedado entre sus dedos para mirar a Harry y mostrarle una mueca extraña.

—¿Cómo carajo se bromea con eso? Son barras de granola, no hay mucha gracia en ellas —argumenta.

—No es precisamente sobre las barras de granola. Es más el cómo parece que todo entre nosotros cuadra casi a la perfección.

Y Harry hace eso de mirar arriba mientras acaricia la envoltura haciéndola crujir suavemente.

Una risa risueña le quiere llenar por completo y su cuerpo parece florecer e iluminarse por completo por sólo pensar en Louis. Como si fuera la razón perfecta que su mente necesita para que sus latidos se disparen y comience a soñar despierto en ese paraíso imaginario que en realidad no tiene mucho sentido al querer proyectarlo en la vida real.

—¿Una broma sobre cómo les gustan las mismas cosas? Parece que-

—La vez que fuimos fuera de la ciudad, a eso de ir a observar la ruralidad para despejarnos un poco, Louis me contó sobre los significados de varias flores, e incluso me explicó algunos de los que tienen sus favoritas —comenta distraído. Interrumpiendo a Zayn y dejando que las palabras salgan por sí solas de su boca cambiando de tema. —Incluso que estos varían de acuerdo al color, ¿no es eso algo hermoso?

La mueca en el rostro del moreno es una mezcla revuelta entre confusión y algo que es parecido a la sorpresa o a la perplejidad.

Con todo lo que Harry le ha informado de todas sus salidas con Louis, que han tomado lugar a lo largo de dos meses y que no han sido más que varias ocasiones en las que se ven y se dedican a pasear alrededor de las calles que son parte de su hogar para pasar un tiempo considerable juntos, Zayn no puede mantener el ritmo con todo lo que pasa en la mente del rizado.

No tiene idea de que sus ojos muestran ese esplendor notorio que no hace más que llenarle por completo el iris haciendo que sus fanales esmeralda realmente parezcan aquella joya a la que su color verde hace alusión constante, y realmente a veces se queda sin palabras para responderle limitándose a una afirmación vaga que se cierra sólo a un par de sílabas.

New kisses ✦ larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora