secrets (2min)

Capítulo 17

TaeMin trató de luchar por alejarse del hombre sobre él, estaban el señor Choi y SeulGi dentro de la casa y podrían salir en cualquier momento, si los encontraban en esta situación y armarían ideas equivocadas en sus cabezas, estaría perdido.

Pensó una y mil maneras de alejarse de él, pero su cuerpo se rindió y pronto se dio cuenta de que dejó de pensar.

Dos pares de labios se rozaban con intensidad, las mordidas y lamidas no se hicieron esperar en la lucha por dominar el beso. TaeMin soltó un pequeño jadeo involuntario y el otro sonrió victorioso. Quiso besarlo hasta el cansancio, pero ese único jadeo era suficiente para él en ese momento.

En el instante que TaeMin sintió que el otro se alejaba lentamente, abrió los ojos y un pequeño brillo se asomaba lentamente, como reacio a que el otro se alejara.

WonHo vio aquellos ojos y trató de contenerse para no besarlo una vez más. "Un paso a la vez" se dijo. "Ya tendré otra oportunidad" concluyó.

Después de todo, él no venía hasta acá para besar a su hermano, él venía acá para contarle unas cuantas cosas que habían sucedido anteriormente. Además, necesitaba saber si estaba seguro donde trabajaba y si conocía a un tal ChangBin.

De pronto, la seriedad de WonHo le dio a entender a TaeMin que algo estaba ocurriendo, y sin más, terminó por empujar completamente a su hermano antes de incorporarse él mismo y sentarse en una de las pequeñas sillas que rodeaban la mesa. Hizo un ademán al otro para que se sentara también, por lo que el otro tomó asiento frente a él.

- Habla. – dijo.

El otro dio un largo suspiro antes de preguntar:

- ¿Conoces a un tipo llamado ChangBin?

- ¿ChangBin? – cuestionó.

- Por lo visto no lo haces, eso es bueno.

- ¿Tengo que hacerlo?

- Si. Y no. – el otro le dio una mirada dudosa. Suspiró una vez más antes de decir – ChangBin fue uno de los que me ayudó a acabar con los hombres de mi padre ese día.

- Eres un maldito imbécil. – respondió TaeMin al recordar esos días. Un impulso de querer matarlo ahí mismo surgió en su interior, por lo que empuñó una de sus manos hasta dejar unas pequeñas marcas de sus uñas en su palma. – debiste avisarnos ese día. ¡Nosotros también teníamos derecho!

- Sé que tenían derecho, pero el viejo conocía mis debilidades muy bien, y tenerlos conmigo solo implicaba una derrota segura.

- Eres un egoísta... - murmuró.

- Pero así me quieres – jugó.

- ¿Quién mierda te quiere? Es obvio que yo no – miró en otra dirección. El otro no pudo evitar sonreír antes de hablar una vez más.

- Como iba diciendo, luego de terminar nuestros negocios, él desapareció por completo y tampoco me interesó buscarlo. Luego de tres años, la empresa iba en picada rápidamente, por lo que investigué el motivo. Entonces descubrí que ChangBin tenía mucho que ver... - empuñó su mano – él tomó unos archivos del viejo antes de que yo pudiera hacerlo, con esos archivos compró acciones muy importantes y nuestros aliados terminaron alejándose de nosotros para irse con él. Solamente los más leales quedaron con nosotros.

- Vaya... eso sería poco – soltó TaeMin.

- En efecto. Fueron pocos nuestros aliados, entonces comencé a buscar nuevas personas, entre ellos logré conseguir a unos muy buenos que el viejo había dejado de lado cuando vivía. Con mis nuevos aliados, comenzamos a reconstruir lo poco que teníamos de empresa, y luego de cinco meses, la empresa se levantó una vez más como la más poderosa. Cuando ChangBin se enteró de esto, hizo hasta lo imposible por destruirnos una vez más. Incluso trató de apoderarse de nuestras máquinas por medio de virus. Hizo hasta lo imposible, pero no pudo. Entonces se alió con una empresa prestigiosa, y entre las dos, trabajaron muy duro para hacernos caer. Lo que ellos no sabían era que yo iba un paso adelante, e hice que esas dos empresas tuvieran una pequeña guerra.