Recuerdos, la llegada de mi hermanastro.

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La pequeña imagen que se mostraba en ese cuadro que descansaba sobre la mesa de su despacho oculto tras unos plateros en su cocina le hizo recordar los pequeños grandes momentos que vivió al lado de esa pareja.

"Padres"

Pensó. Aún hoy en día dolía sus partidas, se sentía como si hubiese sido el día anterior que se fueron de este mundo para siempre, y el recuerdo de cómo había sucedido invadió su mente nuevamente. Cegado por la ira, comenzó a tirar todas las cosas que se encontraban a su alrededor, quebrando sus lámparas y rasgando todos sus libros en dos partes iguales, no se detuvo hasta ver todo desecho en esa pequeña habitación y después de eso, se permitió derramar esas lágrimas que tenía contenidas en lo más profundo de su ser. Agradecía el día en que esos dos bellos hombres le dieron acogida junto a su hermano en su pequeño hogar, brindándoles todo lo necesario para que ellos estuvieran felices, incluido el amor que sus padres biológicos no les pudieron dar, toda la educación necesaria, incluyendo clases de defensa personal para que ellos pudieran protegerse mutuamente mientras ellos no estaban presentes y resguardarse el uno al otro.

Pero maldecía el día en que él llegó a sus vidas, cambiando todo.

Ninguno sabía de la trampa en que estaban metidos, hasta ese día. El día en que supieron toda la verdad y el odio creció de manera incesante. Fue ahí, en ese momento en el cual todas sus dudas se aclararon, haciéndoles ver el por qué de tantas medidas de prevención para con ellos, pero a pesar de todo, no les juzgaban, o bueno él no les juzgaba, porque gracias a ello es que se convirtió en lo que era ahora, gracias a ello el se prometió proteger a las demás personas hasta con su vida y de paso, vengar la muerte de esas dos preciosas personas que le dieron más de lo que él podía imaginar.

El sólo recuerdo de esa rata inmunda, animal rastrero, desecho de la vida, adefesio mal hecho... ¡Rata de...! - lo siento, me he salido mucho de tema –

El sólo recuerdo le hizo tener náuseas. Y el repudio que le tenía aumentó un poco más, a tal grado de recordar el inicio de todo de manera vívida.

Los gritos de su hermano le alertaron por completo, descendió al primer nivel como alma que lleva el diablo, presenciando una escena para nada de su agrado. WonHo, su otro hermano, sostenía de los pies a JungWoo, arrastrándolo por toda la sala mientras le gritaba frases hirientes. No lo pensó dos veces y tomo de los hombros al otro niño, haciendo que cayera de golpe al suelo mientras se abalanzaba sobre él.

- ¡A mi hermano no lo tocas! – y lanzó el primer golpe, seguido de otro y otro, pero no contaba con la presencia de un hombre detrás suyo. La forma brusca en que fue levantado hizo que su cuello tronara duramente y un quejido salió de sus labios.

- ¡¿Qué sucede acá?! – gritó uno de sus padres, lanzando un grito ahogado al darse cuenta de la situación en la que se encontraban sus hijos. - ¡¿Qué les hace?! ¡Suéltelos! ¡Adam! – el grito que lanzó al final fue la gota que había colmado el vaso, el hombre que sostenía al pequeño TaeMin se abalanzó sobre su cuerpo, casi llegando a estrangularlo de no ser por un fuerte impacto que recibió sobre sus pantorrillas, haciendo que perdiera el equilibrio por un momento, momento que fue aprovechado por TaeMin para lanzarle más golpes con una guitarra que había encontrado al final de la sala de estar. Hasta que se dio cuenta que la guitarra ya no daba para más, es que dejó de golpear al tipo que yacía inconsciente bajo sus pequeños pies. Justo en ese entonces, Adam, su padre, ingresó corriendo para averiguar qué era lo que sucedía en el interior de su hogar tras haber escuchado los gritos de su esposo pidiendo ayuda y unos pequeños ¡Muere! En la lejanía.

- ¡¿Qué sucede?!... ¡SANTO DIOS, TAEMIN! – gritó el hombre tras ver a su pequeño hijo sobre un tipo inconsciente, sin dudarlo por mucho tiempo corrió hacia él y lo elevó en brazos, para estrujarlo y llenarle de besos el rostro – mi niño. ¿Qué ha sucedido? – los sollozos de un pequeño JungWoo inundaron el espacio, haciendo que JinKi, su otro padre, se acercara rápidamente a abrazarlo y consolarlo diciéndole que todo había acabado, que ya no estaba en peligro.

secrets (2min)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora