del poliamor y otros pecados del catolicismo ★ hyunho, hyunlix

beside you

— sometimes when you crying you have to ask myself. —dijo hyunjin con un perfecto ingles y las manos en los bolsillos de su pantalón mientras se balanceaba en un solo pie. — am i dating a boy? or an onion? 

— shut up, idiota. —respondió ésta vez jisung ya completamente fastidiado del mismo tema.

jisung no sabía si reír o llorar ante las ocurrencias de su amigo. si bien había peleado fuertemente con su novio, no podía permitirse sufrir en paz a causa del chico que decía llamarse su mejor amigo y no le dejaba subirse a su propio auto. ahora se encontraban ambos chicos parados en frente de la universidad del mayor.

— quítate estorbo, si vuelvo a llegar tarde por tu culpa te asesino, ya cumplí mi labor de traerte ahora permiso. 

— no me cambies de tema sung, estábamos hablando de jeongin, si antes no lo odiaba créeme que ahora sí, dos años de pareja, ¿y no aprende a superar sus malditos celos? 

jisung giró los ojos y se cruzó de brazos. — bueno, no puedes culparlo, ya sabes que es un poco inseguro y es que changbin lo intimida. 

— ¡a la mierda con changbin! ni siquiera lo conozco pero puedo estar seguro que el chico no es la gran cosa como para que ande "intimidando" al idiota de tu novio. —hyunjin se metió un dulce en la boca y dejó que el sabor recorriese todo su paladar mientras meditaba sus próximas palabras.

— wow, hwang hyunjin diciendo groserías, esto se ve dos veces al año, ¿acaso ya es hanukkah?

— muy gracioso han, pero en serio, ¿entonces simplemente por qué si tú amigo lo intimida tiene que reclamarte de esa manera? y además, tiene el descaro de hacerte llorar, como si tu tuvieses la culpa.

era jueves en la mañana, las clases de ambos comenzaban a las tres de la tarde por lo cual (como siempre) pasaron todo el día en la casa del menor, hablando de cualquier frivolidad y se divertían escuchando la música que más amaban, hasta que jeongin decidió llamar a jisung, cosa que terminó en un llanto casi incontrolable.
jisung y hyunjin son amigos desde que tienen memoria, y si por hwang fuese daba la vida con tal de salvar a su mejor amigo, lo cual también implicaba odiar a cualquiera que le hiciese daño a su pequeño han.

— oh no, conozco esa mirada. —dijo el mayor después de señalar acusatoriamente a jisung. — estas a punto justificar al estúpido de yang, y ni creas que lo permitiré, not in front of my salad. 

— oh c*mon! es solo que lo entiendo un poquito, ¿sabes? él en ser-

— ¡él nada! —interrumpió hwang. — seguro ese tal seo changbin es hetero o quien sabe, la cosa aquí es que yang jeongin puede meterse sus estúpidos celos por el culo.

— alumno hwang, me sorprende escuchar ese tipo de vocabulario viniendo de alguien tan decente como usted.

hyunjin se quedó congelado al escuchar aquella voz, la voz que había estado atormentando en sus sueños y pensamientos los últimos días, y ahora simplemente se mordía el labio esperando poder tener fuerza para reaccionar.

— si no entras a clases de yugyeom-ssi nos va a regañar a ambos, ¿no crees? aunque esté ausente un tiempo sigue siendo parte de esta institución y lo respetamos mucho.

jisung miró detenidamente al muchacho en frente suyo, frunció el ceño preguntándose si era alguno de los compañeros que frecuentaban molestar a hyunjin.

— señor lee, claramente no pretendo revelarme ante las del profesor yugyeom, por eso mismo deberíamos usted y yo irnos inmediatamente a clases.

la formalidad con la que aquellos dos hablaban era realmente irónica y solo pretendían burlarse uno del otro, pero minho no entendía eso y simplemente estaba parado ahí observando como comentaban cuanto apreciaban al coordinador kim yugyeom, y que a raíz de su retiro indefinido lo extrañaban mucho.

— hyunjinnie me tengo que ir. —el menor por fin se había atrevido a hablar y después de hacer una reverencia ante minho se subió a su auto no sin antes voltearse y decir con una sonrisa. — no sé quién será ese tal yugyeom pero se nota que lo quieren mucho.

minho sonrió de lado y tomó la mano de hyunjin logrando que este se sonrojase completamente. antes de empezar a caminar logró susurrarle con indecencia. 

— es hora de romper unas cuantas reglas, alumno hwang, y que mejor manera de hacerlo que a su lado.