del poliamor y otros pecados del catolicismo ★ hyunho, hyunlix

long way home

hyunjin se sentía confundido, su ceño estaba fuertemente fruncido mientras veía a los dos chicos que habían estado recorriendo su mente en las últimas semanas hablando animadamente. el supuesto changbin estaba al lado suyo, las piernas de una chica estaban encima de las de él y hacían una especie de competencia por quien se apartaba primero del beso.

suspiró, estaba sentado en un sofá extraño, en una casa extraña, en un ambiente extraño. cuando se supone que debería estar en clase. él no era un chico de fiestas, evidentemente, tampoco era de salir mucho, entonces ni siquiera sabía en qué parte de la ciudad estaba.
se recostó más en el sofá y cerró los ojos, no es como si intentase dormir, de hecho, aún si quisiese no podía, era muy desconfiado y la música estaba muy alta. comenzó a imaginar cómo sería su vida de no haber conocido a jisung, probablemente sería lo más aburrido del puto mundo, pasaría todos los días encerrado en su habitación viendo la misa en la tv, ya que ni siquiera tenía televisión por cable, al menos aquel chico ponía algo de emoción a su vida; después felix llegó a su mente, todas las tardes hablaban, nunca se imaginó que el pequeño podía ser tan rebelde, apenas tenía 17 años; pensó en minho, era su maestro, pero no podía evitar pensar en él de otra manera, ¿era normal que tu profesor de filosofía te llevase a una fiesta de uno de sus amigos? ¿o era normal que le pareciese muy atractivo?

no habían pasado ni cinco minutos cuando alguien tocó su hombro, abrió los ojos de golpe, sonrió. era seungmin, el chico que recientemente había conocido.

— ¿en qué piensas tanto, monaguillo?

— no me digas así. —rió. —me siento fuera de lugar.

— estas fuera de tu lugar, hyun, en serio, ¿qué hace un niño tan tierno como tú, aquí? por dios este lugar está lleno de drogadictos y homosexuales.

ambos rieron. seungmin miró a seo quien seguía comiéndole la boca a una chica rubia y tomó a hyunjin de la mano, lo hizo levantarse e ir a otro lugar, donde hwang seguía teniendo una perfecta vista de los dos chicos que lo volvían loco.

— ¿tu eres homosexual, hyun? —dijo kim después de dar un trago a su bebida extraña.

hyunjin hace tiempo se había planteado eso, recuerda cuando conoció a felix y su corazón se aceleró inesperadamente, recuerda cuando conoció a minho y se puso tan nervioso que sus mejillas se tornaron rosadas. inconscientemente miró hacía ellos dos, reían, el cabello de lee se movía al compás de la brisa que entraba por la ventana, sus labios carnosos eran humedecidos por su lengua y sus delgadas manos cubiertas de anillos sostenían un vaso de alcohol. felix no se quedaba atrás, ese pequeño parecía inocente a simple vista, con su saco que parecía hecho a mano y sus pantalones cortos, sus facciones que daban impresión de haber sido creadas por angeles, con una cintura tan pequeña que podía rodearla con una mano. suspiró. seungmin miró a donde él tenía puesta su mirada.

— oh, ya veo, ¿te gusta minho?

hwang salió del trance y casi se atraganta con el dulce que recién se había metido en su boca.

— ¿qué? —dijo nervioso. — n-no, no me gusta.

probablemente era gay, ya era algo que no podía negar. noches atrás había tenido esa conversación consigo mismo, y con jisung. por más que su religión no lo permita no es malo ser homosexual, y él lo sabía, era fue otra de las cosas que le enseñó jisung, todos tienen derecho a amar. 

pero no creía que le gustase su maestro, sería impropio.

— ¿entonces te gusta felix?

— no... me gustan.

seungmin asintió, obviamente no le creía.

— ¿tu eres homosexual? —ésta vez fue el turno de hyunjin de preguntar.

una fuerte carcajada salió por las labios seungmin. — claro que soy gay, soy el más gay de todos aquí. los únicos no homosexuales son changbin y chan.

— ¿minho y felix son gays?

— minho es bisexual, felix es algo así como pansexual o algunos de esos conceptos extraños que aún no entiendo.

— mi amigo jisung me ha dicho que la pansexualidad no existe y solo es un concepto bifobico.

— chico, yo no sé. —kim alzó los hombros y le restó importancia. — para mi te gusta un chico o una chicas, o ambos, no sé nada más.

hyunjin sonrió, seungmin tenía una curiosa forma de ver la vida. siguieron hablando sobre temas demasiado banales, conociéndose a ellos mismos y juzgando su entorno, al parecer, seungmin tampoco era alguien de fiestas pero tenía una hermosa voz. ambos se llevaban muy bien, y minho se daba cuenta de ello, como reían y tomaban juntos. minho conocía la parte de seungmin que se moría por tener pareja y no iba a permitir que fuese hyunjin quien cayera en sus garras. alzó la ceja cuando kim rodeó con su brazo los hombros de hwang, no pudo evitar seguirlos con la mirada cuando se fueron al jardín trasero juntos.

— ¿min? ¿me estás escuchando? —felix no sonaba enojado pero si resentido, no le gustaba cuando no le prestaban atención.

— sí pequeño, te estoy escuchando, pero, ¿no te molesta que hyunjin se vaya con seungmin?

felix dio un sorbo de su bebida y se encogió de hombros. — ¿por qué me molestaría? él es libre de hacer lo que quiera. 

— pensé que te gustaba.

— me gusta hyung, más no es de mi propiedad.

minho asintió, quizás él solo era un chico celoso. celoso porque no podía llamar la atención de su alumno como él deseaba, no le gustaba esa parte santa y mojigata de hwang y planeaba pronto cambiar eso.

hyunjin se estaba divirtiendo demasiado, seungmin era todo chistes, coqueteos e historias sin fin, ahora mismo se estaban riendo de la vez que kim se cayó del escenario en plena presentación y estaba casi seguro que no volvería a presentarse a una audición de alguna empresa.

— y entonces el ceo se burló de mi, me sentí tan estúpido. —nuevamente estalló en carcajadas. — creo que sm no era para mí.

hyunjin iba a contestar hasta que se distrajo repentinamente, minho acababa de salir al patio tomado de la mano de una chica y ahora estaban juntos bailando. entreabrió los labios y frunció el ceño, no había hablado con el muchacho en toda la tarde y lo que iba de la noche y mentiría si dijese que eso no le estaba doliendo.

— sabes, deberías dejar de mirar hacía allá, no tienes que preocuparte por soojin noona, estoy casi seguro que a minho le gustas tú. —dijo seungmin con desdén.

— no me preocupa, simplemente soy muy curioso. 

seungmin asintió, nuevamente no le creía.

aunque el hecho de que hyunjin era muy curioso en verdad, aún antes de conocer a minho y felix, aún antes de cuestionarse su sexualidad, hwang siempre buscaba formas de cuestionarse a si mismo, por todo lo que hacía, quizás eso fue lo que le insistió a estudiar filosofía. muchas veces había cuestionado su religión, y se había ganado demasiados regaños por ello.

suspiró, ya había bebido demasiado, no tenía muy buena resistencia por lo cual aún estando sentado su alrededor daba vueltas, seungmin seguía a su lado charlado (o eso creía él), la música estaba demasiado alta y en lo único que podía pensar era en que quería ir a casa, lejos de todas las personas extrañas y aquel ambiente incómodo.

— seung, me quiero ir. —pensó habérselo dicho a kim pero para su suerte él ya no estaba escuchándolo.

 — no soy seung pero puedo llevarte a casa.

su vista enfocó a felix quien sonreía abiertamente, no parecía ni una pizca ebrio considerando todo lo que había tomado.

— podemos llevarte.

una voz apareció detrás del menor, no podía distinguirlo pero por su color de cabello suponía que era minho.

— deberíamos tomar el camino largo a casa.