Mi amor eterno

23. Sentimiento agradable

[Daniel Black]

El primer día que fui a la odiosa nueva escuela, me llevé una gran sorpresa… Era el primer día, solo el primero, y pasó algo que en ningún momento volví a pensar: vi a Brianda.

Cuando la vi me sentí tan extraño.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos, por lo que simplemente no supe cómo reaccionar. Me quedé petrificado, por lo que solo pude escuchar dos palabras salir de sus labios. No supe que es lo que quería decirme por el miedo que se produjo en todo mi ser.

No pude reaccionar por cobarde.

Nunca me hice alguna imagen de cómo podría actuar si en alguna ocasión nos volviéramos a ver. Nunca me hice preguntas de qué debería hacer en ese caso.

Durante siete años solo estuve cambiando mi manera de ser. Cuando por fin tenía un incentivo para cambiar y ser mejor persona, ese incentivo desapareció. Nunca comprendí por qué Brianda quería que no intentáramos una relación a distancia, pero al fin y al cabo, ella se fue.

Me gustaría haber sabido que fue de su vida en ese tiempo en el que se fue a España. Me habría gustado ver a Brianda crecer. Me habría gustado ver esa sonrisa en su rostro por más tiempo. Me habría gustado que nunca nos hubieran separado. Me habría gustado sostener su mano por más tiempo. Me habría gustado expresar mis sentimientos de manera más clara.

En realidad, tengo muchos arrepentimientos. Pero… la vida me dio una segunda oportunidad, y la aprovecharé.

Sostendré su mano por más tiempo. Le diré cuánto la amo. La veré crecer. Estaremos juntos…

Solo quiero hacerlo bien esta vez.

En este momento me siento feliz. Me hace feliz verla con esa bonita sonrisa en su rostro, quejándose de algo que le ocurrió en una de sus clases. Rio.

—No es gracioso— dice.

—Para mí lo es— añado con una sonrisa.

Nuestras manos están entrelazadas, por lo que puedo sentir el calor que emana su cuerpo.

—Ha estado haciendo más frío en estos días— dice, mientras su vista se dirige a un punto lejano.

—Sí… ¿No crees que deberíamos entrar para que evites un resfriado?

—¿Solo yo? Creo que sería para que ambos lo evitemos— sonríe. Asiento.

Me pone un poco nervioso entrar a ese lugar mientras todavía es el descanso, porque solo pocas veces lo hago, pero si estoy con Bri, eso es lo de menos; solo quiero estar con ella.

Ayer Brianda no hizo muchas preguntas de lo que le dije en cuanto a lo que me pasó a mí cuando estuvimos “separados”, y se me hizo algo extraño pero es mejor así. Me gustaría no entrar en detalles. No hice algo de lo que me arrepienta, pero ese tiempo ya es algo que quedó perdido en algún lado mi historia. No estoy orgulloso de lo que fui, porque no soy la persona más calmada del mundo. A veces solo reacciono por impulso… Es por eso que quiero mejorar… por ella.

Siento mi corazón palpitar, incluso lo siento detrás de mis orejas. Me siento feliz en este momento, ¿ya lo he dicho?

Esta es una sensación que realmente extrañaba: estar junto a Brianda.

Cuando estamos juntos existe algo que no puedo explicar, solo sé que se siente bien. Es un sentimiento puro.

Una sonrisa de instala en mis labios.

Qué me has hecho, Brianda Wayne.

Ella pone una de sus manos en mi antebrazo, con un sonrojo en sus mejillas. Volteo hacia otro lado.