Capítulo 6

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Narrador:

La princesa Lilith estaba felizmente disfrutando de su día hasta que su bella paz fue perturbada por la llegada del emperador Shovieshu su felicidad había durado muy poco.

—Buenos días, princesa Lilith ¿cómo ha estado su mañana? Espero y no le moleste mi presencia.

—Ya arruino mi mañana con solo verle la cara—pensó para sí misma la peli castaña—Oh, para nada mejor dicho me alegra su visita ¿hay algún motivo de su visita tan inesperada su Majestad?

—Se puede decir que sí, supongo que ya debió enterarse lo sucedido en el salón de banquetes. —Dijo el pelinegro.

—¿Por qué saca ese tema de repente? ¿Será que se enteró de que Yona fue quien me lo dijo y ahora quiere hacerla pagar con su vida? —Pensó la castaña. —Si, su Majestad ya me he enterado de lo sucedido lamentablemente aquí corren muy rápido los rumores.

—Quiero informarle que ya he solucionado el malentendido con el vizconde Lotteshu solamente fue una equivocación. —Explico el emperador.

—¿Por qué mierda me está contando esto a mí? ¿Me ve cara de que me interesa saber? —Pensó la oji dorado. —Entiendo su Majestad, pero podría preguntarle ¿por qué me esta diciendo esto a mí? —Pregunto Lilith poniendo un gesto de confusión.

—Le explico porque no quiero que su amistad con Rashta se vea afectada.

—¿Amistad? —Pronunció confundida la oji dorado.

—Si, me he enterado de que usted a asistido ha una fiesta de té que ha organizado Rashta pienso que ustedes dos ya deben ser buenas amigas.

Al oír eso su rostro se puso pálido como si hubiera visto un mismísimo fantasma ¿en serio su Majestad creía eso? Si su Majestad creía eso es probable que muchas más personas también eso es lo que menos quería que pasará.

Sentía que en cualquier momento se iba a desmayar, pero rápidamente recompuso la compostura cuando vio que el emperador se iba a acercar a ella.

—Su Majestad lamento informarle que Rashta y yo no tenemos ninguna amistad que usted cree simplemente asistí a la fiesta de té que organizó lady Rashta por pura cortesía así que no tuvo porque venir aquí a malgastar su valioso tiempo le recomiendo que se concentre en cosas que si son importantes. —Habló firmemente Lilith con una expresión neutra en su rostro.

—¿Eh?

—Lo invitó a que se vaya de mi habitación su Majestad.

Antes de que el emperador pudiera pronunciar alguna palabra dos de los sirvientes de la princesa Lilith ya lo estaban acompañando hasta la puerta.

Cuando todos se aseguraron que los pasos del emperador se habían alejado lo suficiente pudieron respirar tranquilos dando así todos un largo suspiro.

Rápidamente, la puerta del clóset de Lilith se abrió bruscamente.

Era Heinrey saliendo del clóset.

Lilith pego un grito gracias a la repentina acción que había hecho su hermano.

—¡Maldita sea como se te ocurre abrir así la puerta no pudiste tocar! —Exclamó furiosa la castaña.

—Oh, ¿cómo querías que hiciera? Acaso quería que dijera “disculpa bella hermanita ya puedo salir de tu clóset que si duro un minuto más aquí puede que termine asfixiado con tanta ropa sobre mí” —dijo mientras hacia una cara tierna.

—Te apuesto que eso hubiera sido mejor. —Contesto la oji dorado.

—¿Te puedo preguntar por qué me encerraste en tu clóset cuando vino el emperador?

—No quería que me vieran contigo jugando a quien puede beber más agua. —Respondió Lilith.

—¿Me estás queriendo decir que te avergüenzas de mí?

—Puedes tomarlo como quieras.

—¡Pero soy tu hermano! —Exclamó el rubio.

—Si, si, si, lo que digas ahora me podrías hacer el favor de retirarte me voy a cambiar —Dijo Lilith mientras lo empujaba a la salida.

Cuando Heinrey por fin salió se recostó a la puerta para así poder soltar un largo suspiro.

Yona, Seung y Oliver se le quedaron mirando fijamente.

La peli castaña alzó la vista.
—Yona por favor consígueme algo que ponerme voy a salir dar un paseo.

La albina asintió rápidamente para después salir rápidamente a buscar una prenda de vestir para aquella peli castaña.

Minutos después la oji dorado ya estaba lista cuando salió a dar un paseo por el jardín se encontró con el duque Ergi hablando con Rashta esta miro sorprendida la escena por unos segundos.

El duque Ergi alzó la mirada encontrádose a una castaña mirándolo fijamente este simplemente le mostró una pequeña sonrisa al cual la oji dorado asintió con una sonrisa.


Continuará.

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¡Hola, soy Ryo! ¿Cómo están? ¿Qué les pareció el capítulo? Perdonen las faltas de ortografía también les quería pedir disculpas por lo corto que fue el capítulo es que originalmente los capítulos de Mellizos no iban a pasar de las 1000 palabras también está historia será un poco corta eso será todo por ahora ¡adiós!

MellizosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora