Stay With Me||➳YOONGI; BTS +18

PARTE 16

El profesor había dispersado a los demás alumnos, mandándolos a sus clases. Aproveche para salir del asfixiante abrazo de Yoongi.

—¿Qué sucede aquí? —pregunto a la chica que se encontraba frente al pizarrón. La chica con gesto de fastidio, volteo a ver al profesor.

—Nada —simplemente dijo eso con desaire, saliendo del aula de clases. El profesor le dirigió una mirada a Yoongi, quien solo encogió sus hombros a modo de respuesta.

—Solo vayan a sus clases —antes de salir del salón, recogí del suelo la hoja que anteriormente la chica hizo pequeña entre sus manos.

No fue hasta que estuve por completo fuera del salón, que extendí el papel por completo. Las arrugas habían entorpecido la imagen, pero aún así se podía ver con claridad.

—Salgo bien ¿No? —me detuve a unos cuantos pasos de llegar a nuestro salón. Yoongi había estado siguiéndome por detrás —Una foto digna de un calendario —pronunció por encima de mi hombro. Rei con sarcasmo.

En la hoja de papel, se mostraba una gran fotografía en la que se apreciaba como Yoongi ponía en práctica las clases de anatomía, junto a la chica loca de hace unos instantes. Él encima de ella, sobre una cama pequeña y una tenue claridad iluminaba la habitación. La foto debió ser tomada desde una esquina, pues desde ese ángulo se podía observar todo el contexto. Para suerte de la chica, su cuerpo desnudo no se mostraba, ni siquiera el cuerpo completo de Yoongi. Sin embargo, el trasero de Yoongi era lo que más denotaba sobre la imagen. Su rostro mirando cerca de la cámara, era la razón que lo delataba. Sin eso en su contra, nadie jamás hubiera sospechado de él.

Le restregué la impresión sobre su cara, y entre al salón, sin dejarlo objetar nada. Yoongi tomaba con diversión una terrible situación. La chica lo había amenazado con pegar las fotos en el instituto y a él solo le importaba lo bien que se veía.

¿Estaba enojada?

Por supuesto que lo estaba. Había mentido frente a una pequeña multitud, y eso no era lo que más me molestaba. También Jimin se encontraba ahí. Resople con cansancio. No podía hacer nada para cambiar la situación, pero si podía decirle la verdad a Jimin.

De mi mochila tomé una libreta y comencé a garabatear. Cualquier cosa me servía como distracción. Ningún maestro había llegado todavía, no había nada mejor que hacer.

Yoongi había llegado a su puesto y con su cara sobre su puño me observo. Lo vi de reojo, pero lo ignoré.

—Seul bi, no importa lo que digas no cambiare mi versión —indignada le observe.

—Min Yoongi, tú me metiste en esta situación y lo vas a solucionar —relajado se reclino hacia atrás en el respaldo de su silla. Cruzó sus brazos sobre su pecho, dirigiendo su vista al frente.

—No lo creó, me conviene mantenerte a mi lado —bostezo y luego procedió con su explicación —Desde luego el hecho de que crean que eres mi novia, me trae beneficios. Ninguna chica seguirá intentando ocupar un puesto, que no se encuentra disponible. Yo puedo acostarme con las chicas que yo quiera y como esto es falso tú no te enojaras —aplaudí a su maravilloso argumento.

—Eso no sucederá, eso solo te beneficia a ti —seguí dibujando sobre la hoja, algunos trazos sin sentido.

—¡Ah! Es por Jimin —paso su brazo sobre mis hombros. Lo aparte de inmediato —Él lo entenderá.

—¡No! Esto no sucederá, yo no quiero eso. No soy ningún objeto que puedas manejar a tu antojo. Así que saca esa idea de tu cabeza —sin darme cuenta, lo que había garabateado en el pedazo en blanco era su nombre.
Min Yoongi solo ocupaba mis pensamientos en este momento y no precisamente de buena manera. Había una y mil formas en las no debí de haberme involucrado con él. Empezando por el día en que lo conocí.