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Narra Mason:
- Cheryl - hablo sorprendido y ella me mira a los ojos - no esperaba verte aquí, ¿está todo bien con Olive?
- Solo venía a informarte de que llevare a Olive al partido de selecciones que tienen aquí en Inglaterra - comenta y yo asiento con mi cabeza levemente - y me harías un gran favor sino te acercaras a ella por nada del mundo.
- ¿Eres consciente de que me estás pidiendo que abandone a mi hija? - pregunto y ella se mantiene estática - sé que he hecho muchas cosas mal, y sé que me puse celoso de Ben por tonterías, pero no puedes negarme a Olive, porque si la pierdo a ella por completo perderé mis ganas de vivir.
- No te la voy a quitar, aunque lo intente evitar ella te va a seguir viendo lo que Olive no sabe es que eres su padre y quiero que eso siga siendo así ¿lo entiendes? - pide y yo niego con mi cabeza - si sigues complicando las cosas ya sabes como vamos a terminar y no quiero tener que volver a meter a juzgados de por medio.
- ¿Todo esto es para que ella pueda ver a Ben como un padre? - interrogo y Cheryl aparta la mirada - es por eso ¿verdad?, en ningún momento mis celos fueron injustificados, ustedes dos tienen algo y están intentando escondérselo al mundo.
- Si eso es lo que quieres evitar siento informarte de que tu hija ha sido lo suficientemente capaz de darse cuenta quien ha estado para ella en cada momento importante de su vida, y si ella quiere ver a Chilwell como un padre que lo haga yo no se lo pienso evitar.
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Narra Paola:
- No pasa nada - susurro mientras acuno al pequeño dulcemente - mamá está aquí, mamá está contigo.
- Lo siento - escucho la voz del vasco y yo levanto mi mirada - no tendría que haberos hecho pasar por todo esto, no debería haber sido tan idiota para caer en mi propia trampa y perder a mi familia.
- ¿Ya es un poco tarde para un lo siento no crees? - respondo y él baja la mirada - no has estado ahí en ninguno de los momentos en los que César ha necesitado a su padre y no es porque el trabajo te lo haya impedido, es porque tú no has querido estar.
- ¿Qué va a pasar cuando salgamos de aquí? - cuestiona y yo vuelvo a dirigir la mirada hacía mi hijo - sigue siendo mi hijo y todavía estoy a tiempo de solucionar todos los problemas que he creado con él.
- Sabes que he aceptado hacerle esta maldita cosa a mi hijo porque tú prometiste no volver a acercarte a él - reprocho mientras me levanto del sillón con el pequeño en brazos para volver a la sala de espera - así que sé un maldito hombre de palabra por una vez en tu vida y déjanos en paz a mi hijo y a mi.
- ¿Estáis bien? - pregunta Jorginho y yo asiento con mi cabeza levemente mientras me quita lentamente el bebe de los brazos - creo que deberías hacer como Olive y dormir un rato, no creo que te venga mal.
