Stay with Me. [Atsuhina]

🌧️11🌧️

POV Atsumu

Aunque sabía que era un inútil para nadar fui por Shoyo, tenía esperanzas de rescatarlo yo, tenerlo en mis brazos y protegerlo.

Pero..

Ver a otro hombre.. ver a mi amigo tenerlo en brazos y tratando de hacerle reaccionar me frustraba en sobremanera.

Me acerque hasta donde está Shoyo el cual estaba tratando de sacar toda el agua que había tragado.

—Quítate– le dije a Tsukishima el cual estaba casi encima de Shoyo. Antes que lo empujara para que se quitará el se apartó.

Habían muchas personas alrededor, era incómodo.

Me importó poco lo que estaba pasando alrededor, estaba enojado y preocupado al mismo tiempo, estaba actuando sin pensar en pocas palabras.

Tomé el cuerpo tembloroso de Shoyo, lo alcé dejándolo en una posición cómoda en mis brazos.

Salí de ahí con Shoyo aún en mis brazos. Me dirigí a la primera habitación que encontrará, quería privacidad.

Entre a una de las tantas habitaciones y puse a Shoyo en la cama, fui a por una toalla para que se secará y por una bata de baño.

—¿Te sientes bien?– me senté a su lado y le di la toalla, el me miró con ojos cristalinos.

—Ahora si.. gracias. Tsumu yo.. Por favor, no creas que yo entre solo a esa piscina, juro que sentí como alguien me empujaba cuando iba a volver contigo.– Traté de tranquilizarme, estaba claro que el no había entrado ahí por su propio pie.

Y creo que se quién fue.

—No te preocupes Shoyo, está bien.. estás bien y eso es lo que importa, lamento no … lamento muchísimo lo que pasó, no pude salvarte.. Soy tan patético, lo siento de verdad lo siento mucho… Soy un mal alfa para ti, tuvo que llegar Tsukishima a.. a salvarte yo lo sien—

—Te disculpas una vez más y me veré en la obligación de darte un buen zape–

Me quedé callado después de eso, le ví acomodarse mejor en la cama, parecía prepararse para algo.

—¿Puedo confiar en ti?– preguntó en lo que yo asentí con la cabeza.

—Puedes confiar en mí todo lo que quieras, todo lo que necesites, puedes hasta decirme mentiras y yo te creeré amor mío– me atreví a poner mi mano en su mejilla y repartir varías caricias.

—No me interrumpas mientras hablo, no te enojes de nada.. tan solo.. no te enfurezcas fiera– dijo y yo solo asentí, estaba atento a cada palabra.

—Hace ocho años..