The Habit {L.S.}

Capítulo 20

Capítulo 20

·Harry·

-Styles que hacemos en una tienda de joyería y por que me pediste ayuda a mi-

-Malik estamos aquí por que me tienes que ayudar a escoger un anillo para Louis y como eres su mejor amigo pensé que eras la persona indicada-

-Un anillo? y tu para que quieres comprarle un anillo a Louis-

-Como para que genio, pues es que le quiero pedir que se case conmigo en el viaje a Jamaica-

-Que como que se van a Jamaica-

-Ah si nos vamos por dos semanas a Jamaica, es que quiero que Louis se aleje un poco de aquí y que cuando regresemos nuestra casa ya este lista y no tengamos que volver a un cuarto de hotel-

-Entonces ya van a vivir juntos y le vas a decir a Louis que se case contigo-

-Así es, ahora cállate y entremos a la tienda-

Estuvimos viendo demasiados anillos en la última media hora y ninguno era lo suficiente bonito como para que Louis lo portara, el encargado nos mostró mas anillos y fue ahí cuando lo vi, ese anillo era perfecto para Louis, era plateado con un diamante en el centro no era nada muy ostentoso ya que Louis nunca usaba anillos pero este lo iba a tener que usar y tenía que ser uno lindo pero pequeño.

-Zayn ese es, ¿crees que le guste?-

-Harry por dios, tu le puedes regalar una flor marchita y para Louis va a estar bonita por que tu se la regalaste, así que si Harry, ese le va a gustar o cualquiera le va a gustar por que el anillo es lo que menos le va a importar, lo en verdad le va importar es lo que va junto el anillo, el comprometerse contigo, por que lo único que le importa a Louis es estar contigo para siempre-

Eso fue todo lo que necesitaba escuchar y lo compré, ahora solo esperaba poder esconderlo y hacer que Lou no sospechara nada en lo absoluto, ahora estaba emocionado por el viaje.

Viernes por la noche, nuestro vuelo sale en unas cuantas horas y Louis aun no acaba de hacer su jodida maleta, no se quien les dijo a las personas que hacer maleta de última hora era una buena idea y aquí estoy ayudándolo a terminar de guardar todo, a unas cuantas horas de salir de aquí.

Creo que Louis no sospecha de lo que haré en este viaje y mucho menos de que detrás de todo esto también está Niall, hoy por la mañana fuimos a firmar las escrituras de nuestra propia casa, qué bien suena eso nuestra propia casa, ahora tenemos un lugar propio y un lugar donde más adelante podremos formar nuestra propia familia.

Después de treinta minutos por fin Lou termino de hacer su bendita maleta y por fin podremos ir al aeropuerto, como odio tener que estar horas antes de un vuelo en el aeropuerto, pero así son los protocolos, pero cada vez falta menos para estar en Jamaica, puede que se convierta en uno de nuestros lugares más importantes.

Después de tanto esperar por fin estábamos en el avión, Lou siempre tenía que elegir el asiento de la ventana, decía que eso le tranquilizaba, afortunadamente cuando compre los boletos aún había en primera clase ya que este iba a ser un vuelo largo, el capitán empezó a darnos la bienvenida al vuelo y la azafata nos comenzó a dar las instrucciones en caso de cualquier emergencia y al decir que el vuelo iba a despegar Louis tomó mi mano, sabía que siempre la había dado miedo los vuelos, sobre todo cuando despegaban o cuando había turbulencias.

No habían pasado más de veinte minutos del despegue y Louis ya estaba dormido, me dediqué a verlo dormir por unos minutos hasta que me pudiera quedar dormido, ya que eran las dos de la madrugada, cerré mis ojos y me quedé completamente dormido.

Desperté gracias a que ya por las ventanas entraba la luz de día, desperté a Louis con un beso en los labios, estaban por servir el desayuno, a ambos nos sirvieron lo mismo, cuando terminamos nuestro desayuno, y recordé algo que siempre había querido hacer, así que tomé a Lou de la mano para que se levantara de su asiento y me siguiera directo al baño.

Ambos entramos en el y comencé a besarlo, él solo correspondió el beso, sus manos fueron directo hacia mi cabellera rizado y comenzó a dar pequeños tirones, mientras que mis manos recorrían toda su espalda hasta llegar al comienzo de su culo, baje mis manos hacia él y lo comencé a tocar a mi antojo, deje su boca para poder dirigirme al lóbulo de su oído y comenzar a morderlo y Louis comenzó a dar besos por todo mi cuello y vaya que eso la jodida gloria.

-Ah Ha...Harry, que estas haciendo-

-Tu sabes perfectamente que estoy haciendo-

-Pero Harry aquí-

-Ambos sabemos que lo quieres, así que ahora ven aquí-

Lo jale y volví a sus labios mientras que mi mano se dirigía hacia su notoria erección y la comencé a tocar por encima de su ropa, Louis soltaba pequeños gemidos que se ahogaban en mi boca, mis manos dejaron su erección para poder quitar la playera que traía puesta y tirarla en el suelo del baño, Louis trató de quitar mi playera.

-Tomlinson que haces, recuerda que aquí mando yo-

Desabroche mi pantalón para poder bajarlo junto con mi boxer y guíe la mano de Louis hacia mi pene ya erecto y comencé a guiar su mano en movimientos lentos hasta que se arrodilló y metió mi pene en su boca, lo tome de su cabello para poder acelerar el movimiento de boca -Ah Lou...Louis- fue inevitable no poder soltar su nombre en un gemido, antes de que pudiera venirme en su boca lo levante para poder besar esos labios rojos que tenía, sin interrumpir nuestro beso baje su pantalón junto con sus boxers e introduje uno de mis dedos en el medio de ese bello culo que tiene y comencé a penetrarlo hasta que estuvo listo.

Me senté donde pude para poder poner a Louis sobre de mi y pudiera montarme, la sensación de estar dentro de él era como saborear la misma gloria, el montándome y yo masturbandolo -Ah, Harry, así- los gemidos de Louis siempre eran como música para mis oídos pero aquí no lo podia hacer asi que tome su boca entre mis labios y los comencé a besar como si hubiera estado necesitado de esos labios por mucho tiempo, ambos sabíamos que nuestro orgasmo estaba cerca, lo segui besando para callar sus gemidos y así fue como lo llene de mí y él se vino sobre su abdomen dejando rastros de semen en mi playera.

Ambos nos tratamos de arreglar en un intento de eliminar cualquier rastro de lo que había sucedido ahí, salimos y nos dirigimos a nuestros asientos esperando las siguientes horas del vuelo para llegar a nuestro grandioso destino.