El Contrato

Capítulo 7. La sonrisa de Elaine.

Elain había conocido a su mejor amiga Ashley en segundo año de secundaria, la habían transferido de colegio nunca había podido tener amigas verdaderas. Le costaba demasiado confiar en las personas.

Ashley se llevaba muy bien con todos, era como un rayo de sol que llegó a calentar el corazón de Elain ganándose su confianza y su amistad. Se volvieron inseparables. Los fines de semana organizaban pijamadas, iban a sus fiestas y hacían las tareas y proyectos juntas.

Todo iba muy bien entre ellas, eran inseparables. Hasta que llegaron al último año de preparatoria, el hermano de Ashley, Dylan había vuelto de su internado en Madrid. Luego de 5 años estaba en casa. Sus padres habían organizado una fiesta de bienvenida.

Ashley había invitado a Elain, estaba muy emocionada por ver a su hermano de nuevo y presentarle a su mejor amiga. Su padre había ido por él al aeropuerto mientras ellas terminaban de adornar junto con sus otros familiares.

Cuando llegó su madre y ella corrieron hacia el abrazando lo entre lágrimas y sonrisas. Él no dejaba de sonreír feliz, había extrañado tanto a su familia. Toda su familia se había acercado para recibirlo y abrazarlo.

Ashley aprovechó para ir por Elain y presentársela, la tomó de la mano llevándola hasta él. Dylan sonrió y la saludó con una gran sonrisa. Las mejillas de Elaine se sonrojaron, la madre de Ashley la llamó y ella fue a ayudarle dejándolos solos un momento.

Había tardado más de lo esperado, hablaría con su hermano, tenía tanto que contarle y preguntarle. ¿Él la aceptaría? No quería decepcionarlo, quería su ayuda para acercarse de modo romántico a Elain. Se había enamorado de ella desde la primera vez que le sonrió.

Al principio sólo la veía como su amiga pero poco a poco Elaine se apoderó de sus pensamientos y sus sueños.

Una vez que se desocupo fue a buscar a su hermano pero no lo vio por ningún lugar, y Elaine tampoco estaba. Era muy extraño, siguió buscando y los encontró charlando muy entretenidos sentados en la orilla de la piscina con los pies adentro.

No paraban de reír, ¿En qué momento se habían vuelto tan cercanos? Se estaba imaginando cosas, ¿No?

Colocó la mano en su pecho y suspiró profundamente para mantenerse tranquila y se acercó colocándose en medio. Los tres charlaron hasta muy tarde. Ella y Dylan fueron a dejar a Elaine a su casa.

Ashley ya no estaba tan animada como antes, ya luego hablaría con su hermano. Ya habría tiempo para ello.

Con el paso del tiempo la luz de Ashley se fue apagando, Elaine y ella ya lo salían juntas. Además tenían los exámenes de admisión para la Universidad cerca. Así que ambas se la pasaban estudiando en sus respectivas casas.

Y aunque Ashley sabía que estaba ocupada la sentia distinta con ella, no era la misma Elaine que siempre estaba para ella, que siempre le sonreía solo a ella. Y tiempo después entendió el porqué.

Luego de los resultados ambas habían quedado en la misma Universidad por lo que se reunieron para ponerse al corriente sobre lo que les estaba ocurriendo. Ashley estaba muy feliz de ver a Elaine nuevamente. Pero al llegar al café en donde estaba la notó distinta, incluso había cambiado su cabello lo que la hacía aparentar otra edad.

La saludo y tomó asiento enfrente de ella, por alguna razón el ambiente entre ellas ya no se sentía igual. Había cierta incomodidad, la cual se fue borrando mientras conversaban. Entonces Elaine soltó de golpe que estaba enamorada de Dylan, que incluso habían salido varias veces pero no se lo habían dicho porque no sabían como lo tomaría.

Sorprendentemente Ashley le sonrió a su amiga diciéndole que no había problema. Charlaron un poco más y cada una tomó su camino, Ashley se detuvo y se giró viendo como se iba.

Sus ojos se humerecieron y rompió en llanto. Nunca pudo confesarle sus sentimientos que llevaba guardando tanto tiempo. Sentia que el aire se le agotaba, tenía su mano en su pecho.

Dolía, verla hablar de su hermano con esa hermosa sonrisa que ya no le pertenecía dolía demasiado.

- Elaine.... no me dejes... -susurro-.