ᴇʟ ᴜ́ʟᴛɪᴍᴏ ᴀᴛᴀʀᴅᴇᴄᴇʀ (𝑙𝑢𝑧𝑢𝑝𝑙𝑎𝑦)

ᴇsᴛʀᴇʟʟᴀs

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❲ Parte 1 ❳

Un par de semanas después...

── Papá, espera por favor ── dijo el chico de cabello castaño con sus ojos llenos de lágrimas.

── No te voy a devolver estas libretas, no haces nada de provecho con esto, solo pierdes el tiempo escribiendo ── respondió ante la súplica del contrario, mientras este le miraba.

Aquel hombre nunca soporto que el chico tuviera un gran parecido a su hermano cuando era pequeño, la relación que tenía con este no había sido la mejor, le odiaba por eso así que haría su vida miserable mientras pudiera. Si fuera por el ya lo habría echado de casa, pero por otras razones debía mantenerlo allí, al menos hasta que cumpliera los dieciocho años que sería dentro de unos pocos días.

── Yo no he echo nada ¿porque me tratas así, porque me tratan así siempre? Que les hice... ── el hombre vestido de traje y corbata solo salió de la habitación sin decir nada y cerrando la puerta.

── Solo déjenme ser libre... ── dijo en un hilo de voz quedando de rodillas en el suelo.

Se quedó en el suelo viendo la pulsera que le había dado Auron, aunque no podía estar allí, sabía que de alguna forma el le seguía acompañando, se levantó y se acostó en la cama quedándose dormido casi de inmediato sin pensar más nada. Los sueños son un mundo alternativo que varios buscan, para no acabar agotados con la realidad.

────── ❲ 𝙉𝙖𝙧𝙧𝙖 𝘼𝙪𝙧𝙤𝙣 ❳ ࿐

── He ganado Samuel, pagame ahora ── escuche esas palabras salir de la boca de Rubén mientras acomodaba mi ropa en el armario.

── Como que ¿pagame? ── hable fingiendo indignación y girandome para verlos a ambos ── ¿han hecho apuestas sin mi? ── hable fingiendo estar ofendido.

── Tranquilo, solo apostamos cuanto tardaría en conquistar a Luzu ── rieron viéndome desde la cama.

── Claramente tu no podías formar parte de la apuesta ── dijo el chico de cabellos negros sacando diez dólares de su cartera y dejándolos en las manos de Rubén.

── Oh... Vale ── respondí con una sonrisa nerviosa, mientras me sentaba frente a mi escritorio.

── ¿Y que harán cuando nos tengamos que ir de aquí? ── habló Rubén haciendo que miles de ideas surgieran en mi cabeza, mientras Samuel le abrazaba por la espalda.

── Bueno, creo que aún queda tiempo para eso, no hay que adelantarnos ── respondí desviando el tema, sin darles la respuesta larga y tendida que estaban esperando.

── ¿Saben dónde está Fargan? ── pregunté cambiando el tema, pero la verdad si quería saber sobre el chico, éramos muy buenos amigos.

Me quedé esperando alguna respuesta por parte de alguno ── Estuvo en el desayuno y luego creo que se fue a pasar el día con Dulce, y si preguntas por las chicas están tomando clases de inglés ── respondió Rubén, yo esperaba que respondiera Samuel, el siempre estaba pendiente de todos, pero bueno, tampoco me quejo.

── ¿Y ustedes? no tienen nada que hacer, más que estar ahí de empalagosos ── sonreí empezando a escribir sobre una página en blanco, ellos solo rieron ante mi comentario.

Salieron de mi habitación a hacer sus cosas y yo me quedé escribiendo una carta, luego de un rato salí a caminar esperando encontrar a Luzu, ya que como el no tenia teléfono pues no había forma de saber si lo dejarían salir.