ᴇʟ ᴜ́ʟᴛɪᴍᴏ ᴀᴛᴀʀᴅᴇᴄᴇʀ (𝑙𝑢𝑧𝑢𝑝𝑙𝑎𝑦)

ɴᴜɴᴄᴀ ᴛᴇ ᴠᴀʏᴀs

── Al fin pude encontrarlos... ── susurró cierto chico vestido completamente de negro, con lágrimas que amenazaban con escapar frente a lápida de sus padres.

── Llegué un poco tarde, lo sé... pero el destino no me dejo disfrutarlos, ni siquiera un pequeño instante ── su voz sonaba rota y desgastada, Auron observaba callado desde una esquina, un poco conmovido.

── Desearía que siguieran aquí ── llevo ambas manos a su cara cubriéndola casi por completó y rompiendo en llanto después de haberlo contenido por tanto tiempo.

── Luzu... ── Auron se acerco rápidamente al chico, ahora de rodillas en el suelo, levantandolo y dejandolo llorar en su pecho mientras lo abrazaba.

── No puedo comprender tu dolor... pero me quedaré aquí hasta que dejes de llorar porque no te puedes guardar eso para siempre ── lo llevo hasta un banco de color blanco que se encontraba cerca y bajo la sombra de un árbol.

No quería aceptarlo, quería abrazar a sus padres y saber que nunca se fueron, pero la realidad era otra y debía aprender a vivir con ello.

── Tenemos que seguir el camino, el sitio que dijo mi padre... Aún esta lejos, nos están esperando ── paso su mano suavemente por el rostro del contrario quitando algunas lágrimas y viendo aquel rostro un tanto pálido.

── Bien... ── respondió Luzu levantándose y empezando a caminar solo el dirección al auto.

Auron lo alcanzó y tomo su mano ── No estás solo ── el contrario le regalo una tierna sonrisa y ambos subieron marchandose de aquel sitio en dirección al lugar que tenían planeado ir.

[...]

Auron

── Luzu... Ya llegamos, ven mira esto ── hablé luego de bajar del auto, esperando a que le emocionara tanto como a mi.

Abrió sus ojos luego de escuchar mi voz, ya que estaba dormido, salio del auto tomando mi mano, algo me decía que tenía un poco de miedo.

Fuera del auto se podía observar una hermosa casa de dos plantas, de color blanco y algunos detalles grises en lo alto de un acantilado con vista al mar, como otras varias alrededor.

── ¿Te gusta? ── pregunté

── Es... Bonito ── sonrío

Algo no estaba bien, pero podríamos hablar luego, ahora teníamos que bajar las maletas e instalarnos en lo que sería nuestro hogar ahora.

Pasadas un par se horas...

Terminamos de acomodar todo, algunos guardias de papá se quedarían con nosotros, antes de ir nuevamente con Luzu hable con mamá, para verificar si todo estaba bien.

Luego fui con el, estaba en la habitación, con el móvil sobre la cama.

── Hablemos, ven ── le tomé de la mano llevándolo fuera, hacía algunas rocas en las que nos sentamos viendo el cielo de fondo junto al mar.

── Lo siento... a pesar de todo estás intentando que esto al menos parezca estar bien... Y yo solo lo hago ver peor ── dijo apartando la mirada.