takashi mitsuya x fem oc.
Reiko está en una etapa complicada de su vida; una adolescente en desarrollo que, a diferencia de las demás niñas de su escuela, es diferente valga la redundancia.
A Tokyo Revengers fanfic.
Posibles temas sensibles para alg...
¡Hola! Este capítulo es de agradecimiento a su apoyo en la historia por las 4.14k de visitas y los 812 votos. En el transcurso de la semana volveré a actualizar, muchas gracias por tanto cariño.
Hoy es mi cumpleaños, así que quise hacer esto lo más bonito posible, rompiendo la cuarta pared un poquito.
— kisho.
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Los jóvenes muchachos caminaban tomados de la mano, el cabellos lilas en su mano libre sostenía un ramo de bonitos y vivos girasoles con pequeñas margaritas blancas que contrastaban el brillante amarillo del ramo envuelto en un precioso papel color café claro y un lazo amarillo; mientras que Reiko, alegremente con su mano libre sostenía un postre de vainilla con un bonito glaseado de galletas con crema.
Ambos adolescentes irían a visitar a una amiga que, pese a ser mucho mayor que ellos ha sido amable, respetuosa e incluso es para ambos jóvenes, una hermana mayor la cual Mitsuya respeta no sólo por ser mayor, sino por tener una dedicación y demasiado cuidado y delicadeza con sus acciones frente a los demás, incluso es mayor que el hermano mayor de Mikey.
La pequeña pareja conoció a aquella mujer por simple casualidad, Reiko esperaba al muchacho de cabellos lilas y esa situación que todas las mujeres suelen enfrentar con el miedo en su sangre llamado acoso callejero, fue más que suficiente para que esa joven adulta la defendiera, más que eso, quedarse hasta que Mitsuya viniera por ella; a partir de ese momento, Reiko ha encontrado una amiga, una consejera y a su vez una hermana con la cual se sentía segura, nada más seguro para Mitsuya que una mujer apoyando a otra mujer respetando su espacio y su edad.
Debido a esto, ambos muchachos quisieron agradecer tanto apoyo, amabilidad y respeto celebrando su cumpleaños número veinticuatro; así que decidieron sorprenderla con aquellos regalos que tenían en sus manos. Llegar a la casa en la que su amiga vive junto a su pareja deteniéndose frente a la puerta los ojos turquíes y los ojos lilas se miraron fijamente.
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