𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟗 - 𝐂𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐭𝐢𝐞𝐦𝐩𝐨

159 21 26
                                    


Durante el camino al restaurante mantuve mi cuerpo aferrado a la musculosa espalda de Levi, el viento golpeaba mi cuerpo y me brindaba una sensación de libertad increíble, la cual era complementada con la presencia de Levi y su aroma tan masculino que envolvía mis sentidos. 

Pude escucharlo cantar un poco una que otra canción de Bon Jovi y John Lennon, parece gustar demasiado de las canciones de ellos puesto que durante el trayecto dejó que suenen, su voz es grave al cantar aunque lo hiciese casi murmurando y eso me gusta demasiado, quizá más adelante tenga la oportunidad de escucharlo cantar con mayor claridad. Se que poco a poco él y yo podremos aumentar la confianza que ahora no tenemos, ya que la idea es conocer todo lo que nos permitamos. 

Porco piensa que es algo apresurado, que no nos conocemos a fondo y quizá sea cierto, hay miles de cosas que no se de Levi, como su canción o cantante favorito pues hasta ahora solo tengo una simple suposición de ello, incluso no se cual es su sabor de helado preferido, pero eso no minimiza el hecho de que ambos queremos empezar algo lindo y hacer las cosas correctamente.

Puede que muchas parejas se tomen mucho tiempo para conocerse antes de empezar una relación formal, pero a lo mejor él y yo funcionamos de manera distinta, solo conectamos y nos sentimos felices con ello.


9:15 pm

Levi me ayuda a descender de la moto luego de haberla aparcado, intento arreglar rápidamente mi cabello después de quitarme el casco.

-Tranquila, te ves preciosa -me sonrojo mucho ante el comentario.

Me extiende su mano y la tomo, un escalofrío recorre mi columna vertebral y mi piel se eriza con el solo roce de su mano con la mía. 

Si tan solo nos hubiésemos conocido antes, Levi...

Caminamos juntos acercándonos a la entrada del restaurante, por fuera pude divisar tres pisos más una terraza bastante iluminada. Lucía realmente rustico a la par que elegante, las brillosas columnas de madera bordeaban la puerta principal, la cual era de cristal dejando a la vista un poco del interior y la recepción. 

Nos adentramos y un gran candelabro colgando del techo captó mi atención por completo, bastante delicado y caro, las mesas eran redondas y llevaban por encima manteles de seda fina con algunos bordes personalizados encima de la misma. 

Un aroma exquisito invade mi nariz sin pedir permiso, probablemente provenga de la cocina. La suave melodía del piano aportaba un ambiente tranquilo y limpio en todos los sentidos, los que estaban cenando muy augustamente se veían muy importantes jerárquicamente hablando, muy dentro de su papel y conversando animadamente con sus acompañantes. 

Me dejaba guiar por Levi mientras admiraba la preciosidad del lugar, él en ningún momento soltó mi mano. 

Nunca tuve la oportunidad de estar en un lugar como este, mi familia siempre ha sido bastante humilde en el aspecto económico y solo cuando se presentaba la oportunidad, cenábamos fuera en lugares de comida rápida o restaurantes medianamente buenos comparados a este, sin embargo mi padre se esforzaba bastante para llevarnos fuera.

Ava la pasó bastante mal cuando mis padres fallecieron y nadie quería encargarse de mí, sin embargo, pudo resistir a todo ello y conseguir ascender en su trabajo dándome una buena vida, logrando pagar el examen de admisión en mi actual universidad, el cual no es nada barato.

- ¿Pasa algo? -Levi se inclina un poco hacia mi algo preocupado-. Llevas un buen rato frunciendo el ceño, ¿Hay algo que no te guste?

-Discúlpame... estaba divagando un rato, pensando en Ava y en cómo era todo antes -río melancólica.

𝕽𝖊𝖘𝖙𝖊 𝖆𝖛𝖊𝖈 𝖒𝖔𝖎, 𝕽𝖔𝖘𝖊 | | 𝓛𝓮𝓿𝓲 𝓐𝓬𝓴𝓮𝓻𝓶𝓪𝓷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora