Cuando mi madrastra no está.

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Esto sucedió el fin de semana. Me llamo José y tengo 17 años. Hace casi cinco años mis padres se divorciaron. Mi mamá está en Vietnam hace mas de un año, por lo que estoy viviendo con mi papá. Sandra mi madrastra se vino a vivir a nuestra casa hace aproximadamente siete meses y con ella vino Antonio, su hijo, un chico de 15 años, delgado, de ojos verdes y una melena rizada que le llegaba al cuello, era muy buena onda y siempre tenia un tema del cual conversar por lo cual me llevé muy bien con el desde el primer día.

-Ya es tarde, vayan a dormir- dijo mi padre mientras daba un bostezo.

-Ok pá- dije mientras apagaba el ordenador y me dirigía al cuarto.

Mi cuarto es bastante amplio con una cama matrimonial en la cuál dormíamos Antonio y yo.

-¿Jose, mañana me llevas a comer pizza al restaurante del centro?- se sentó en la cama.

-Esta bien- le removí el pelo.

Nos colocamos los pijamas y nos acostamos como de costumbre. Ya mis ojos se estaban cerrando cuando la pregunta de Anto me quita de ese estado.

-¿Tú te masturbas? - WTF! no respondí -Yo si- dijo. Sacó su verga y se la empezó a jalar. Me quede totalmente en blanco, Anto nunca me había hablado de esos temas, nose que le pasa.

Comenzó a tocarme el pecho bajando a mi abdomen deteniéndose en mi entrepiernas mientras me susurraba al oído- que rico- mi cuerpo no respondía, excepto mi verga que se puso dura.

-Que rápido creció, tu bóxer no va a resistir semejante bulto- dijo

Me sonroje y dije lo primero que me vino a la mente -mejor vamos a dormir.

-No tengo sueño aún, además mañana no tenemos escuela- comenzó a meter su mano en mi bóxer, dejando mi miembro expuesto. Miré a Anto y sin decir nada, acerco su cabeza a mi pija y la metió a su boca. De mi boca salían varios gemidos de placer mientras mi verga entraba y salia de la boca de Anto. Donde aprendió hacerlo tan bien. En pocos minutos solté una gran cantidad de semen en su boca, la cuál Anto trago con gusto y excitación.

Luego de eso fui a darme un baño, no asimilaba lo que acababa de pasar, pero no lo voy a negar, me gustó.

Al día siguiente me levante y cuando miré a mi lado Anto no estaba. Me sentía un poco confundido por lo que pasó anoche.

-Jose, ya esta el desayuno- abrió la puerta mi padre.

-Ok pa, ya bajo

Cogí mi cell y baje a la mesa.

-Buenos días - salude a Sandra y a Anto, el cual me respondió con una sonrisa un poco pícara.

Me senté en la mesa y comencé a desayunar.

-Chicos, saldré con Carlos (mi padre) a casa de una vieja amiga, volveremos en la tarde. En el refri tienen el almuerzo, solo tienen que calentarlo- dijo Sandra mientras se levantaba con mi padre- no inviten a nadie a casa.

-Ok- dije mientras recogía las cosas.

Al terminar subí a mi habitación.

-Hoy estaremos solos - dijo Anto mientras entraba al cuarto.

-Si, por lo que no te podré llevar a la pizzería.

-Ah, tranquilo prefiero quedarme en casa- sonrió - ¿Sabes que me gustaría hacer?

-Que

-Me gustaría saber que se siente que te la metan- se acercó.

-Em... S...- me puse nervioso.

Se acercó mas a mi y comenzó acariciar mi polla por encima de la ropa.

Por mucho que me resistía, con cada caricia Anto me ponía más hot. Empuje a Anto contra la cama y comencé a besarlo mientras nos quedábamos completamente desnudos. Comenzamos a masturbarnos mutuamente haciendo que Anto se corriera en mis manos.

Lo puse en cuatro sobre la cama y con su semen le lubrique su entrada.

-Con cuidado, es mi primera vez- me dijo.

Puse una almohada debajo de su vientre y puse su cabeza contra la cama. Puse mis manos en sus caderas y lo penetré despacio. De su boca salieron pequeños gemidos de dolor y placer.

-Metelo todo- dijo entre gemidos, a lo cual obedecí. Empuje mi verga hasta su fondo de una fuerte embestida.

  Mi verga entraba toda en su culo. Anto movía su culo y lo apretaba hasta que hasta que comencé mi vaivén. La habitación se empezó a llenar del olor a sexo y de nuestros gemidos. En uno de mis vaivén saque mi polla para voltearlo.

-Espera, tengo una pequeña cámara de vídeo y gravé a nuestros padre teniendo sexo. La instalé en el dormitorio de ellos en la noche- vaya, definitivamente no conocía a mi hermanastro.

Abrimos el ordenador y pudimos ver como mi padre le metía su gran verga en la boca a mi madrastra, pero en serio la verga de mi padre era enorme. Vimos todo lo que hicieron incluyendo un 69.

-Quiero hacer eso- señalo Anto a la pantalla.

Anto, me abalanzó contra la cama, se subió arriba de mi haciendo el 69. Cogió mi verga y la chupaba como nunca, e hice lo mismo. Su lengua saboreaba todo mi glande y movía sus manos al compás de su boca mientras metía su verga hasta mi garganta.

En ese mismo instante sentimos como alguien abre la puerta. Mi corazón se paralizó.

-Que están haciendo- dijo exaltado mi padre.

Nos quedamos en blanco y ni siquiera nos movimos.

-Vine a por un regalo que se nos quedó, Sandra siguió, llegara primero- sonrió- ahora van a sentir una verga de verdad- nos tomó y nos puso en cuatro.

Sacó su verga que debe medir unos 39 cm de largo y 7 cm de grueso, tomó a Anto, le abrió las nalgas y se lo metió de una embestida. De los labios de Anto salio un gemido sonoro, que fue silenciado por unas nalgadas de mi padre.

-Shh- siguió metiendosela hasta que dío unos bufidos y se vacío en el culo de Anto, el cuál que sangraba y soltaba semen.

Espero que les haya gustado este capítulo. No olviden votar. Os quiero

Drabbles (Relatos Eróticos/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora