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Minho llevó a Jisung por los grandes pasillos, caminando a paso rápido por el pasillo mientras miraba hacia atrás, Jisung iba tras de él, sosteniendo la mano de Minho con fuerza.

Las puertas se abrieron, con 3 guardias entrando apresuradamente.

"Príncipe Minho, no puedes salir. Es en contra de las reglas de tu padre". Exclamó un guardia, mirando alrededor.

"Mierda, corre, corre". Chilló Minho entre risillas, empezando a correr por el pasilo.

Jisung corría junto a Minho, dejando que el mayor lo guiase. Podían oír el metal de las armaduras de los guardias mientras corrían detrás de ellos, pero, por suerte, las pesadas armaduras parecían que retrasaban a los guardias, dándole a Minho y Jisung una oportunidad de escapar de ellos.

"Aquí, aquí". Susurró Minho casi en voz alta entre risas, apuntando a la habitación por el lado de Jisung.

Jisung abrió la puerta y metió a Minho. Los dos cerraron de un portazo, entrando aún más para asegurarse de que no eran vistos o escuchados. Jisung miró a su alrededor. Parecía que habían entrado en una biblioteca. Estaba poco iluminada y llena de libros polvorientos y viejos libros.

Las puertas de la biblioteca se abrieron, haciendo que Minho y Jisung saltaran de sorpresa. Minho inmediatamente atrajo a Jisung detrás de uno de los sofás, haciéndole un gesto para que se mantuviera en silencio. Jisung se cubrió la boca con su mano para refrenar sus pequeñas risillas que se les escapaban.

"Esta habitación está vacía, sigan buscando".

Los dos adolescentes lentamente salieron de su escondite hacia la puerta. Minho echó un vistazo a ambos lados, antes de agarrar la mano de Jisung y atraerlo para seguir por el pasillo.

"Venga, venga". Susurró Minho, llevando a su novio rápidamente por el pasillo.

Jisung podía sentir la adrenalina recorrer su cuerpo. La emoción de ser parte de los actos traviesos y de rebelión de Minho hacía que su corazón latiera con fuerza. Tenía que admitir que Minho era especialmente atractivo así. Con una gran sonrisa en su cara, disfrutando el peligro que estaban encarando. Haciendo lo que él quería sin las restricciones que le imponían las reglas y los guardias.

Jisung tiró para atrás a Minho por su brazo, inmediatamente agarrando su cara con su mano libre y tomando los labios de Minho con los suyos. Minho le devolvió el beso a Jisung inmediatamente, empujándolo hacia la pared, con su cuerpo presionando el del contrario. Jisung gimoteó en deleite del sentimiento.

Minho había afirmado su agarre a su cintura, el cual usaba para mantener a Jisung contra la pared. Minho inclinó su cabeza, forzando su lengua en la boca de Jisung. Jisung la aceptó inmediatamente, recorriendo sus manos desastrosamente por el cabello de Minho.

Ambos desconectaron sus labios, jadeando fuertemente contra el contrario. Minho no se separó, queriendo al menor lo más cerca posible.

"Oh, dios mío, Jisung". Dijo Minho, prácticamente gimiendo, mirando a Jisung con sus ojos entrecerrados.

Jisung sonrió, dejando un leve mordisco en los labios de Minho. Este se quedó quieto, dejando que el menor hiciera lo que quisiera.

"LOS ENCONTRÉ, ESTÁN AQUÍ".

Sin pensarlo dos veces, Minho y Jisung saltaron hacia la dirección opuesta de la pared.

"Mi cuarto, no saben quién soy". Susurró Jisung, corriendo a la izquierda cuando Minho tenía planeado ir a la derecha.

Minho rápidamente se corrigió, agarrando la mano de Jisung. Los dos rieron ruidosamente mientras corrían. Minho se giró, sonriendo mientras veía a seis o siete guardias persiguiéndolos.

Royal - Minsung (Traducción) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora