Jake & Henry - 7º Capitulo Especial

2 El plan perfecto

Henry esperaba en una mesa junto a la ventana en uno de los restaurantes de su padre. Había pedido tres vasos de agua en lo que llevaba allí, y no habían pasado más de cinco minutos desde que llegó. Había citado a Claire, Chris y Chace para comer con él, porque tenía que pedirles consejo para algo muy importante. Su triple C. Sus mayores confidentes. El primer en llegar fue Chace, después llegó Chris, que saludó a Chace con una palmada en la espalda y removió el pelo de Henry. Mientras Woods se peinaba mirando con fastidio a Chris, Claire llegó.

—Siento llegar tarde. Mi último paciente no me liberaba— explicó dando un beso en la mejilla a todos los presentes.

Chris se rascó el mentón.

—¿Qué tenía? ¿Bipolaridad, alcoholismo? ¿Era un Hannibal Lecter?

—Ya sabes que no hablo de mis pacientes, Chris.

—Yo podría ser psicólogo, me gusta escuchar.

Claire ladeó sus ojos. Ya había escuchado más de una vez esa frase.

—Es algo más complejo que simplemente ser un cotilla.

—También doy buenos consejos— se defendió Chris.

—No tantos— contestó Claire comenzando a mirar la carta.

Henry carraspeó entonces.

—Hablando de consejos...

—¿Queréis un vino para beber? —sugirió Chace.

Claire asintió.

—Yo agradecería una copa de vino.

—Pero lo elijo yo— soltó Chris robando la carta de Chace. — Vuestro gusto es pésimo.

—¿Disculpa? —inquirió Chace.

Chris se encogió de hombros.

—Bueno, solo hay que mirar a vuestras parejas.

Chace soltó un bufido despectivo.

—Solo lo dices porque Beverly es mujer.

—Exacto, no sé cuantas veces decirte que te cambies de acera.

—No sé que tiene de malo Shorty—dijo entonces Claire.

Los tres chicos se miraron unos a otros, pero prefirieron no contestar o Claire se levantaría y se marcharía.

—Aquí los únicos con buen gusto, somos mi mejor amigo y yo—dijo en su lugar Chris, rodeando con el brazo los hombros de Henry, que le apartó molesto.

—Tú ni siquiera tienes pareja—acusó Chace a Chris.

Los ojos de Chris se entrecerraron.

—Porque no quiero, además, ¿qué tiene que ver eso con el buen gusto?

Henry volvió a carraspear.

—Hablando de parejas...

—¿No quieres o no consigues alguien que te aguante más de dos días? —inquirió Chace con saña.

—Uh eso ha sido un golpe bajo, Chace— con fingido dolor. — Eres guapo, pero cruel. Y eso me gusta.

—Para—pidió Chace.

Claire se masajeó el puente de la nariz.

—No empieces a ligar con Chace otra vez, por favor.

—Vale, vale— respondió Chris entre risas. De pronto se fijó en que su mejor amigo estaba mirando fijamente el mantel. — Oye Henry, ¿Qué te pasa?