Capítulo 7

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Maxine

—Deberias ir y hablar con el — me dice Keyla, después de que le conté a detalle lo que pasó en el bar, después que la pelirroja me dejó en la puerta de mi edificio

—No lo sé, Key, no se que quiere de mi — suspiró tirándome de espaldas a la cama, Carlos está en la escuela y podemos hablar libremente hasta que llegue en unas horas, miro el techo y pienso en las palabras de la pelirroja

—Justo por eso deberías ir, mira te enviaron hasta la dirección de la mansión Lazcano, ese es todo un monumento — suspira — ve a vestirte, vas a ir, y vas a hablar con el holandés que te...

—Ni se te ocurra decirlo — le recriminó, bostezo y la miro, no quiero ir, pero a la vez si, es que tengo un embrollo en la cabeza, porque creía que el se iría y pues ya saben no volver a verlo y yo seguir atraída por el, porque bueno, no es tan fácil de olvidar

Y mucho menos después de lo que pasó en el baño del bar, muerdo el interior de mi mejilla y miro a mi hermana en un nuevo intento de ver en sus ojos la solución a mis problemas, ella me empuja y caigo de culo en el piso, me levanto confundida lazandole una almohada

—Ve a vestirte — me hace un gesto con la mano — y ve a hablar con el

—Key — arrugó la nariz y camino al pequeño armario —¿De verdad? — aprieto más mi mejilla con los dientes

—Claro que si, sabemos que quiere llevarte con el y pues no lo sé pero me parece una buena idea

—No me digas — contesto con sarcasmo

—Si, si te digo, muy pocas veces encontramos un multimillonario en el baño de mala muerte de un bar que nos ofrece irnos con el — suspira

—¡Dios! Cállate — me río y ella me sigue — no sabemos que intenciones tiene — le recuerdo

—Y a eso vas, no aceptes nada hasta que estés segura de lo que que quieres, eso es un problema viniendo de ti, pero bueno algo se puede hacer — arrugó el entrecejo y ella se ríe más alto, —ponte el vestido rojo — propone, hago una mueca y sacudo la cabeza — entonces el negro

—Me voy a poner estos vaqueros desgastados y este top negro — le digo sacando lo que dije, es un top manga largas y lo agradezco para el frío que empieza a hacer, tomo un pequeño y viejo abrigo

—Deberiamos ir de compras con ese montón de dinero, ya que casi no tenemos — me río, no quiero usar el dinero, pero tampoco puedo deshacerme de él porque me darán el doble si intento regresarlo, o eso me dió a entender Charlotte

—O mudarnos, suena mejor, con eso alcanza para cubrir los gastos todo un año o incluso más — me pierdo en mis pensamientos con el vaquero hasta las rodillas — no lo sé, pero debemos pensar que hacer con el

—Tienes razón, pero primero debemos pensar que hacer el holandés guapo — se encoge de hombros mientras se levanta de la cama, me terminó de vestir y consigo un par de botas desgastadas y me las coloco, acomodo mis rizos en una cola de caballo y muerdo mi labio inferior viéndome en el espejo

Al menos no estoy tan mal, Keyla me entrega mi identificación y un par de billetes

—Creo que te alcanza por los taxis — me dice, coloca las manos sobre mis hombros — ve con cuidado y llámame para cualquier cosa

Me da un beso en la frente y luego me empuja fuera del edificio con el corazón a mil aprieto el teléfono que dejaron para mí contra mi pecho y bajo las escaleras saliendo del viejo edificio, camino calles hasta llegar a una vía principal donde puedo tomar un taxi

A Tu Manera ~Hoffam #1~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora