Capítulo 34

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Arjen

Salgo de ella despacio, recuperando el aliento, los brazos me arden y los veo con pequeñas gotas de sangre, un ataque de euforia, le llamo yo, me pasa seguido cuando experimento la sensación de matar a alguien, yo libero endorfinas cortando los cadáveres veo que esto le funcionó a ella y de paso a mi

—Quiero preguntarte algo — susurra, levanto mis pantalones, la sangre de Wyatt me tiene a punto de vomitar y su comentario me hace buscar la respuesta a porque a dos pasos de mi casa tenemos una bodega de tortura

Mamá la hizo, cuando nuestro tío Javier no quiso dejarnos usar la flooting además que estar embarazada se le dificulto mucho el viajar, así que papá le compro el lugar y ella lo adapto a sus gustos

Fue utilizado por primera vez con la enfermera y el esposo que le robaron la vida a mi hermano, o eso me contaron, alguien toca mi hombro y veo los ojos café de Maxine trayendome a la realidad

—Claro, pregunta lo que gustes

Se ríe y acomoda su ropa

—¿Que hacen en el cementerio de Mallorca?— enarco una ceja confundido — Charlotte estuvo del otro lado cuando sepultamos a Keyla y tu antes de partir pediste que te llevarán allí, ¿Que hacen ahí?

—Oh eso — me río — creía que ibas a preguntar porque tenemos una bodega de torturas

Aprieta los labios

—De eso tengo curiosidad pero quiero saber que me dice Charlotte

—Charlie trajo al tipo que intento violarla cuando estábamos en la escuela — suspiró — aquellos tiempos

—Aunque se oye como una gran historia — presiona — quiero saber la respuesta a lo que te pregunté

—Oh si claro — muerdo mi labio inferior — visitamos a nuestro hermano

—¿Hermano?— asiento, tomo su mano porque por más que quiera seguir hablando con ella el olor repugnante de la sangre del francés no me permite concentrarme — ¿Que pasará con el?

—Como si no hubiese existido — respondo simple, subo las escaleras que nos llevan a mi oficina, aqui debo tener algo de ropa la nuestra está llena de sangre, la guío a la ducha interna, no dice nada pero admira todo — y con referente a mi hermano... Si, Charlotte y yo vinimos en un paquete de tres, mamá tuvo trillizos, cuando teníamos cuatro mi tía con trastorno bipolar y según mi madre, esquizofrenia

»Hizo que matarán a mi abuela, y de paso a mi hermano, aunque bueno, Aubrey había quedado vivo y por una enfermera dispuesta a hacerse rica a costa de el, hizo que el doctor declarara muerto a mi hermano, pero estaba vivo, lo secuestro y junto a su esposo pidieron dinero para devolverlo, cuando papá dió el dinero y consiguió a Aubrey en el hospital no pudieron hacer nada, mi hermano mayor murió en los brazos de mamá

»Sacaron el cadáver del que supuestamente era mi hermano que estaba al lado de la tumba de mi abuela y enterraron al que de verdad tenía nuestra sangre, en enero a su memoria y a la de la abuela nos reunimos todos ahí, y cada que Charlotte y yo tenemos oportunidad, vamos a visitarlo

—Oh vaya — el agua nos cubre a ambos y sonrió de medio lado admirando las marcas de nuestro encuentro — ¿Que paso con esa enfermera malvada?

—No disfruto su dinero, mamá la asesino embarazada de los mellizos

—¿Toda tu familia es así de sádica?— asiento, riendo

—Mama asesino la macosta de la vecina cuando tenía 6 años y jugo con la sangre, fue divertido cuando nos lo contó

A Tu Manera ~Hoffam #1~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora