1. Nueva Vida

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—Mayor (a)_____, tengo listo el informe de nuestro ultimo caso para que, pueda ver nuestra experiencia en el área.

—Muchas gracias, Capitán Iruma. Lo revisare; puede retirarse.— me dedicó una sonrisa muy amplia y se dio media vuelta para dirigirse a la puerta de mi oficina. Antes de salir por completo, regresò su vista a mi.

—Te amo.— dijo y se fue.

Acaba de matarme, por competo.

Sus palabras me hicieron sonreír a más no poder y a gritar para mis adentros.

El sexo había pasado a segundo plano, en serio me quería, lo sentía y podía notar cuan enamorado estaba de mi; seguramente he de estar igual.

Leí su informe y me sorprendió encontrar una hoja extra, que ya no era parte dé.

"Realmente me sentía como un hombre superior, el que podia tenía a cualquier mujer que deseara a sus pies. Solo me fijaba en cuerpos pero, antes de que eso pasara en ti, tus ojos me sorprendieron; tu porte fue un plus.

Decidí esfumar mis pensamientos sacudiendo mi cabeza y ahora si centrándome en todo lo que podía ser mío. Te quería tener, pero eras una mujer muy firme, decidida y al parecer, nada fácil de corromper. Eso sin duda sería un serio problema para mí.

El coqueteo era uno de mis fuertes, la seducción mi arma mortal, aquella vez que tuvimos el primer acercamiento sexual, mi intención era dejarte con ganas, que tu fueras quien me rogaras hacerte mía, pero, al parecer no salió como yo esperaba. Tú me provocaste, fui yo quien terminó rogando poder tenerte, y sinceramente pensé que ahí terminaría todo, pero irremediablemente, comenzaba a pensar en ti, pero no solo en tu cara de placer, o cuando dejabas escapar un gemido. Te imaginaba sonriendo, esa sonrisa que le regalabas al resto de policías cuando bromeabas con ellos, cuando atendías a alguna persona que buscaba asesoría, o cuando lograbas destrabar la copiadora.

No entendía que era lo que me pasaba, solo sé que de repente comencé a espiarte desde la oficina. ¿Creerás que leí de nueva cuenta tu currículum sólo para abofetearme mentalmente por mis actitudes de hombre deseado? Pensaba que solo era una obsesión, entonces volví a tenerte, quizá eso me dejaría con la mente libre de ti, sin embargo todo incremento más.

Aquella mañana al verte con una expresión de preocupación, verte tan afligida y cambiando completamente tu actitud. Cuando te vi irte sin más... entendí que te quería, que te necesitaba. Me quede a esperarte, porque algo en mi pecho no me permitía irme y dejarte sola sin saber si regresarías a tu casa.

Verte tan frágil aquella vez, me aclaro mis sentimientos. Te quería, te quería en toda la extensión de la palabra; quería protegerte, cuidarte, hacerte feliz. Y de la nada... te fuiste. Me rompiste el corazón.

Estabas en mi estación, por lo que pregunte a mis superiores y ellos fueron quienes me dijeron dónde encontrarte.

¿Recuerdas que dije que quería hacerte feliz? Por eso te deje seguir tu sueño como mayor, aunque yo no estuviera en ese plan, sabía que a ti te haría muy feliz tener ese ascenso, y más aún al ser la oficina donde creciste y te desarrollaste como la mejor policía de todo Japón. Pero, algo simplemente seguía inquietándome... me dijiste que sería el único que podría vivir en tu corazón pero, ¿y si otra persona te hacia feliz? No me gustaba la idea.

Me esforcé demasiado para lograr mi ascenso, y cuando se presentó la oportunidad de cambiar de oficina, sin dudarlo pedí Osaka. Si es que, de pura casualidad tú ya tenías a otra persona, eso no me haría detenerme y me esforzaría por despertar todo aquello que yo te hacía sentir.

「Un Sucio Policía 2」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora