4. Coartada

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—______... pero, ¿no crees que es muy pronto para que regreses?— preguntó Jyuto mientras yo me dirigía al otro lado de la habitación.

Estaba arreglando la maleta del bebé mientras lo traía cargando en uno de mis brazos.

—No, yo creo que está bien. ¿Puedes cargarlo? Necesito doblar su cambio de ropa.

Él se acercó a quitármelo y lo cargo dándole un pequeño beso en la cabeza.

—Pero, no creo que te deje trabajar. Es un poco inquieto y...

—Si, se parece a su padre.

—Va a querer agarrar lo que sea que haya en el escritorio, no te va a dejar trabajar a gusto.

—Si, se parece a su padre.— repetí y solté una risa. —Jyuto, tranquilo. Mi oficina es amplia, vas a llevar la mecedora y ahí se va a estar. Conforme crezca, las cosas cambiaran.

Jyuto llevó al bebé a su cuna, lo recostó y volvió conmigo para tomar mi cintura.

—Apoyaré tu decisión entonces.— me besó —¿Qué debo subir al auto?— le dediqué una sonrisa y coloqué la pequeña bolsa con las cosas de Ryo sobre la mecedora y la señalé para que Jyuto se la llevara.

Me besó antes de cargarla y salir de la habitación; yo fui por Ryo para cargarlo y seguir a su padre hasta el auto.

Al llegar a la estación, fui recibida con mucho cariño, y la mayoría de los oficiales se acercaron a saludar a su nuevo mini Mayor.

        

(...)

        

Las cosas parecían ir muy bien. Demasiado, para ser verdad. Ryo era un niño hermoso que le bastaba sentarse con un par de peluches y así ya no necesitaba de mi, no como su padre que entraba a la oficina sólo para divertirse... no a plena vista del niño, pero si.

—¿Quieres comer, Ryo?— pregunté mostrandole su pequeño biberón. Ryo estiró las manos y lo acomodé para que pudiera comer, justo cuando el comenzó, el teléfono de mi oficina sonó.

Me aseguré de que Ryo estuviera cómodo y me apresuré a contestar.

—Mayor (a)_____... no, no, Mayor Iruma, ¿correcto?

—Teniente Coronel, usted tan simpático como siempre— reí. Desde que Jyuto y yo nos casamos, siempre hace incapie en que ahora uso el apellido de mi esposo. Es un chiste local de él —¿Cómo se encuentra?

—Muy bien, y me encontraré mejor luego de que me digas que asistirás a la próxima reunión de cargos medios.

—Oh... habia olvidado que eso existía. Pero... si, desde luego que asistiré.

—¡Eso era lo que quería escuchar! Además, es la ocasión adecuada para que el Capitán Iruma pase una noche de chicos con su pequeño retoño.

—Bueno... eso podría no pasar. Aún me da miedo dejarlos solos.— él soltó una carcajada.

—Suenas igual a mi esposa. Tampoco me dejaba estar a solas con mis hijos, a menos que estuvieran dormidos. ¿Pero sabes una cosa? El Teniente Iruma hará todo lo que esté en sus manos para cuidar bien del pequeño, es su hijo después de todo, y si lo privas de estar con él, nunca podrá aprender.— suspiré.

—Creo que tiene razón. Bueno, nos veremos en la reunión, Teniente Coronel.— dije antes de colgar.

Si quiero que Jyuto se acostumbre al pequeño, nada me haría más feliz... pero, ¿En serio dejaría que él solo se encargará de Ryo?

「Un Sucio Policía 2」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora