En uno de los millones de multiverso que pudo ver Dr strange, hay uno en el cual todos los héroes de Marvel , y filiares a incorporar, cursan en una secundaria donde conviven con poderes y todos. Encontramos al chico nuevo , Helmut Zemo, un noble hu...
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Esa noche duermen juntos, en realidad James prácticamente no utiliza la habitación de le dieron desde que se mudó hace ya casi un mes. Todo en su vida cambio desde que lo conoció a Helmut. Todos los temores del pasado, haber sido la herramienta de Hidra, y un asesino quedó en el pasado y ahora tiene toda esta nueva oportunidad de vivir y ser feliz. Todo su pasado quedó como un mal sueño del que al fin pudo despertar. Todas las cosas que tuvo que hacer obligado por su condicionamiento mental. Quería dejar todo atrás. Por primera vez se sentía como el chico de Brooklyn que amaba a alguien. Y además era correspondido.
Despertó abrazado a Helmut, le gustaba mucho esa cercanía, la necesitaba, para no volver a sentirse solo y vacío. Helmut lo complementaba, lo llenaba de amor, cariño y cuidados, algo que no había sentido desde que era un niño. Y entendía también a Helmut, toda una vida de lujos y riquezas y no puedo evitar que la tragedia lo afectara, además su educación fue muy distante preparado para ser un noble de un país que ya no existe.
Olió su cabello, le encanta hacerlo, lo revolvió un poco, lo observaba dormir, todavía tenía las marcas de la pelea del lunes, ya solo eran marcas amarillas y violetas, pero ahí estaban recordándole la fragilidad que posee y aún así no retroceder ante los desafíos que tiene delante. Ama su inteligencia y que le preste tanta atención. Besa su cuello, y sus labios. Le da pequeños besos, húmedos en todo el rostro. Se siente tan enamorado de este chico que no quiere separarse ni un minuto y dejar pasar ninguna oportunidad de hacerle sentir todo lo que lo ama.
Helmut despierta después de un par de besos en el rostro.
-¡Buen día! ¿Preparado para ser mi copiloto?
-Buen día James, si desayunemos y preparemos las mochilas.
-De acuerdo ratita. Vamos a levantarnos. Te duchas primero.
-Sí, una ducha rápida.
Helmut se levanta, siempre usa pijama, no como James que apenas se pone interiores y a veces ni siquiera. Pero Helmut siempre usa pijamas. Le gusta, porque tiene algo especial sacarle el pijama cuando están íntimos. A pesar de ser pijamas horribles tipo años 50 con botones y a rayas. Sólo a él podrían quedarle bien. Dejó la puerta del baño abierta, por el reflejo puede verlo como se desviste, y entra a la ducha. No puede dejar de mirarlo, hay algo tan magnético que no puede dejar de ver a su novio.
Le gustaría regalarle algo, algo especial y significativo, pero no sabe bien que, ¿Qué se le regala a alguien que tiene prácticamente todo? Piensa y se concentra para averiguar que le gustaría. Helmut ya salió de la ducha.
-Un centavo por tu pensamiento. Le dice de repente.
-Perdón ¿Qué?
-Estas demasiado concentrado esta mañana, un centavo por tus pensamientos, me dices que piensas y te doy una moneda, es una expresión inglesa James.
-Te vi entrar a la ducha y pensaba en ti, ¿Qué te gustaría que te regale?
Helmut envuelto en una bata blanca de toalla se sienta en la cama al lado de James.
