𝟷𝟻

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La castaña se levantó y fue a desayunar unos cereales y un nesquik, cuando acabo de desayunar subió a la habitación y se dio una ducha, se puso unos pantalones de mezclilla de campana un poco rotos y una camiseta de tirantes verde, unas nike air blancas, se maquilló un poco, se puso perfume y todo lo que le faltaba, cogió un bolso pequeño negro y ya estaba lista, bajo al jardín a esperar a que Pau llegara a recogerla. Hoy habían quedado para ir a comprar el vestido que necesita la joven para la boda de la tía de Pau la cual había invitado a ambos a ir, la boda sería en Palma de Mallorca, España, hará calor así que el vestido que comprará tendrá que ser de verano. Después de un par de minutos Pau tocó la puerta y salió de casa.

-Hola, que tal- pregunto la chica abriendo la puerta.

-¿Bien y tu?- pregunto el chico mientras ambos iban hacia el coche del rubio.

-Pues bien, tengo ganas de comprar el vestido- dijo sentándose en el asiento de el copiloto del coche de el joven.

-Espero que no tardemos mucho, que odio ir de compras- dijo arrancando el coche.

-Pues te aguantas, que también me tengo que comprar unos pantalones- dijo riendo.

-Bueno, no me quejo, que por lo menos vienes a la boda de mi tía-

-¿Como no iba a ir?- le dijo la chica. -Tu viniste a Manchester-

-Por cierto, me debes un helado, que gane el partido del otro día- le dijo mirándola y luego volvió su vista a la carretera.

-Es verdad, se me había olvidado, cuando acabemos las compras vamos a por tu helado-

En el viaje estuvieron hablando y riendo todo el rato por quince minutos que son los que tardaron en llegar al centro comercial y ambos bajaron de coche, entraron al centro comercial y a la primera tienda que fueron fue a la de el vestido ya que era la más importante.

-Ayúdame a buscar- le pidió la castaña al rubio el cual le hizo caso y se pusieron los dos a buscar. -Mira este, ¿ Te gusta?-

-Si, es bastante bonito- dijo mirando el vestido que le había enseñado la castaña.

-Pau, un poco más de ganas- se quejó la chica ya que el rubio no sonaba convencido. -¿Te gusta de verdad o solo lo dices para que nos vayamos ya?-

-Que si me gusta, te lo prometo- le dijo yendo hacia la chica. -Seguro que te queda genial-

-Me lo voy a probar, por si acaso- le dijo yendo hacia los probadores.

-Vale, te espero aquí- dijo el joven mientras la castaña iba a los probadores y entraba a uno. Después de unos cuantos minutos la chica abrió la cortina y llamo a Pau.

-Pau, ¿Te gusta?- le pregunto girándose las verse en el espejo y luego mirarlo por el espejo.

-Estás guapísima con el vestido- le dijo asomándose por la cortina y dejando de ver el móvil.

-¿Si?- pregunto la chica.

-De verdad-

-Vale, pues lo compro- dijo cerrando la cortina y cambiándose otra vez.

El rubio aprovechó que la castaña estaba ocupada para ir a pagar el vestido, sabía que si no no le dejaría pagarlo, fue a la caja y lo pago después vio a la chica salir de los cambiadores.

-Ya nos podemos ir- dijo el chico acercándose a ella y abriendo la bolsa que le habían dado para que metiera el vestido.

El vestido era de tirantes, un poco escotado y liso, era de un color gris azulado, era perfecto para la ocasión.

-¡Francisco!- le reclamó la chica. -¿Porque has vuelto a pagar algo que tenía que pagar yo?-

-Por que ya me vas a comprar tu un helado- le dijo metiendo el vestido en la bolsa. -Venga vamos-

-No comprares un helado con un vestido un caro, que no quiero que lo vuelvas a hacer que si no me voy a enfadar-

-Vale, vale- le dijo sonriendo por la respuesta de la chica.

-Bueno, ahora a por mis pantalones- dijo agarrando al chico de la mano y tirando de el hasta la tienda de los pantalones que quería. -Aquí-

-Haber, cuáles quieres- pregunto el chico.

-No se, tengo que ver- le contestó yendo a la sección de pantalones.

Estuvieron como diez minutos buscando unos pantalones hasta que la chica encontró unos que le encantaron, fue a probárselos y le quedaban genial, fueron a pagar y salieron de la tienda, la chica estaba feliz.

-¿Me las llevas?- pregunto la chica poniéndole ojitos al chico extendiéndole las bolsas.

-Que mona eres cuando poner ojitos- dijo el chico riendo y llevando las bolsas. -¿Me compras el helado?-

-Vamos- dijo riendo la castaña. -¿De que lo quieres?-

-De limón- pidió el chico mientras ambos iban a la heladería.

-Vale, ahora vengo, siéntate en una mesa que encuentres- dijo Beatrice yendo hacia donde se pedían los helados.

Pidió el helado de limón que el chico le había pedido y para ella no se pidió nada ya que no tenía hambre. Le dieron los helados y fue a la mesa donde Pau se había sentado.

-Aquí tienes el helado que tanto querías- dijo riendo y dándole el helado al chico haciendo que sus manos rozaran.

-¡Gracias!- dijo emocionado y probando su helado. -Esta buenísimo, ¿Tu no quieres nada?-

-No tengo mucha hambre- le contestó la chica sonriendo.

-¿Quiere un poco del mío?- pregunto extendiéndole el helado.

-Bueno, un poco- dijo riendo y probando el helado del chico. -Esta bastante bueno, pero mejor el de chocolate-

-¡¿Como que bastante bueno?! Esta buenísimo- le dijo el rubio y ambos rieron.

Estuvieron un rato esperando que Pau acabase su helado y vinieron al coche.

-Bueno, te pongo una bendición para tus oídos como siempre- dijo sonriendo la chica una vez ya estaba en el coche y puso música de Louis Tomlinson.

-Siempre me pones música de Louis Tomlinson, ¿No te apetece poner a otros cantantes?- pregunto riendo el chico y arrancando el coche.

-Si yo lo hago por tu bien- le dijo y ambos rieron. -Aunque no lo creas, es verdad, ya me lo agradecerás un día-

Estuvieron todo el viaje en coche a casa de Beatrice cantando las canciones que había puesto la castaña hasta que llegaron.

-Nos vemos el fin de semana que viene- dijo la chica desabrochándose el cinturón.

-Si, adios- le contestó el chico dándole un beso en la mejilla y luego la chica salió del coche y entró a su casa.

Llegó a casa y llamó a Addison y a Myra.

-Chicas, Pau y yo vamos a ir a la boda de su tía y me he comprado un vestido, ¿Queréis venir a pasar el día mañana a mi casa y ya de paso os lo enseño?-

A: Yo me apunto, a las 12 de la mañana estoy en tu casa

M: Yo también me uno, mañana nos vemos en tu casa Bea

-¡Vale! adiós chicas

A: Adios

M: Chao


-💖✨

𝐽𝑢𝑛𝑡𝑜𝑠 𝑝𝑜𝑟 𝑐𝑜𝑛𝑣𝑒𝑛𝑖𝑒𝑛𝑐𝑖𝑎 -𝑃𝑎𝑢 𝑇𝑜𝑟𝑟𝑒𝑠 -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora