capítulo 8

401 46 26
                                    

Tomó un profundo respiro para luego tratar de sonreír simpáticamente hacia el chico, al fin y al cabo el no tenía la culpa de que su relación no funcionara y que su ex novia se estuviera dando otra oportunidad pero definitivamente no le gustaba que lo mirara con cierto desafío, dulce no era una cosa por la cual pelear, si, era afortunado el hombre que la tuviera a su lado, pero no la haría sentir jamás una cosa en una estúpida pelea, rascó su cuello antes de tomar el ramo de sus manos y hacerlo pasar para luego caminar hacia la cocina. Sonrió con sinceridad hacia ambas mujeres desayunando quiénes lo miraron confundidas con el ramo en sus manos

- ¡Oh qué bonito Christopher!, Pero ya sabes que dul odia las flores- agregó la ojiverde con una sonrisa -

- de hecho tish...las trajo el novio de Dulce- declaró e inmediatamente su ceño se frunció al escuchar a la pelirroja ahogarse ante la sorpresa mientras su madre la miraba interrogante-

- ¿Tú qué Dulce?- preguntó la ojiverde mientras que la pelirroja negaba rápidamente-

- te dejaré esto en agua- aclaró el castaño- le dije que te esperara en la sala mientras te da tiempo de arreglarte, si me necesitan estaré en la habitación necesito redactar algunos documentos para la empresa, permiso

La pelirroja lo miró atentamente desaparecer de la cocina con cierta incredulidad, miró a su madre qué la observaba igual o hasta más confundida que ella causando cierta curiosidad en ambas, ni siquiera ella sabía que tenía novio.

Nerviosa se levantó de la silla dirigiéndose hacia la sala en busca del chico, quién la esperaba con una gran sonrisa y brazos extendidos, con cierta inseguridad se acercó hasta él comenzando un abrazo que duró por poco segundos, levantó su vista para luego ofrecerle una pequeña sonrisa de saludo haciéndolo sonreír igual

- lo siento por no venir ayer, tenía mucho trabajo en la construcción- justificó el chico mientras la pelirroja sonrió para ofrecerle tranquilidad-

- no te preocupes Chris, igual ayer estuve muy ocupada, mis padres llegaron de sorpresa ,y bueno, no creo que hubiese Sido un cómodo lugar para conversar

- entonces...- susurró el peliazul- ¿Deberíamos sentarnos?, Porque nos debemos una conversación

- si, claro, podemos sentarnos- la pelirroja comenzó a tomar sus manos con nerviosismo sin saber por dónde comenzar mientras el peliazul frente. A ella la miraba expectante, tomó un respiro profundo para tranquilizarse consiguiendo una pequeña risa del chico causando que ella se riera nerviosamente- no te burles de mi

- ¡no me burlo!- exclamó divertido- pero me parece un poco cómico tus nervios- declaró acercandose a ella tomando sus manos- dul, antes que nada somos amigos,¿No?

- así es- concedió en un susurro la pelirroja -

- no quiero que está conversación sea incómoda, solo quiero sinceridad y transparencia es lo único

- no sé por dónde comenzar - se sinceró dulce en un susurro-

-  Dulce, enserio necesito que me aclares todo, yo de verdad estoy muy enamorado de ti, me enamoró esa mujer agerrida, valiente, graciosa, inteligente y amorosa que eres, estoy enamorado de todo lo que te conforma y quiero estar en tu vida, quiero seguir este viaje de la mano.
Ya te lo he dicho antes, no me interesa si no podemos tener hijos porque al menos te tendría a ti - susurró y la pelirroja abrió sus ojos con un poco de sorpresa y cierta molestia-

- ¿Al menos?- pregunta la pelirroja- lo dices como si no te quedara de otra que aceptarme sino puedo tener un hijo Christian

- no es lo que quise decir- susurró pensativo el chico- de todo lo que te dije ¿solo eso captaste?

Bebé abordo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora