Capitulo Quince

17 3 1
                                    

Capitulo 15: Un poco más cerca.


Un rayo de luz que entraba por la ventana acababa de despertarme, había puesto mi cuerpo hacia atrás, donde la luz no quemara, y ahí estaba él, durmiendo tan en paz, su rostro trasmitía tranquilidad y su piel tan suave...

Me levanté de mi cama y me senté sobre la parte de sus pies, estaba buscando la manera de recostarme junto a él, sentirlo más cerca, pero su cuerpo ocupaba casi todo el espacio, dormía como si no lo hubiera hecho por mucho tiempo.

Me acerqué a su rostro para poder susurrarle al oído.

-Déjame un lugar...- Le dije en un tono suave aunque no pude evitar que se asustara un poco y retirara mi cuerpo al levantarse de golpe.

-Que susto.-Dijo mirándome fijo mientras intentaba contener la risa.

Su rostro había tomado un color rosa que con los segundos se tornaba cada vez más fuerte.

-Perdón-Sonreí.-Solo quería estar cerca de ti.-Termine de decir mientras volvía mi cuerpo hacia mi cama.

Se abalanzó sobre mí y tomo mi brazo con un poco de fuerza, moviéndome aún más cerca de su cuerpo, podía sentir su respiración cerca de mí, como si lo que le dije antes hubiera despertado algo en él.

-No te vas a volver a tu cama- Dijo clavando su mirada en la mía.-Ahora ya me despertaste.-Termino de decir con una ceja en alto.

-Está bien.-Le dije intentando no mirarlo directamente.

Un silencio se formó luego de mis palabras, solo podía sentir como sonreía por encima de mí, no era capas de mover mi rostro hacia arriba para observarlo, pero lo sabía. Movió una de sus manos por mi cuello, tomándome con suavidad un mechón de pelo.

-Ven a descansar conmigo-Dijo casi posando sus labios en mi oído.

Podía volver a sentir esa energía, eso que solo él podía hacer en mí, apreté mi mano sobre su espalda apegando del todo su cuerpo con el mío.

-Déjame un lugar...-Repetí como la última vez.

Soltó mi cabello y corrió un poco su cuerpo sin dejar de agarrarme, tenía su mano en mi cintura y uno de sus dedos hacia un zigzag sobre mi espalda, podía sentir cada sutil movimiento como si me estuvieran dando choques eléctricos. Puso su cabeza de lado para poder observarme y termino de alejarse mientras se sentaba otra vez en la cama.

Me acerque y espere que se pusiera cómodo para poder acompañarlo.

-¿Crees que esto está bien?-Dije posando una de mis manos sobre su rostro.

-No me importa-Dijo sin más.

-Puede venir tu padre, o la doctora, o la comida.-Dije citando oportunidades que en verdad tampoco me importaban.

-Tienes razón, pero ya es tarde, si nadie vino aun, nadie vendrá.-Dijo en un tono suave mientras acercaba su rostro al mío.

-A mí tampoco me importa.-Termine por decir.

Él sonrió y con lentitud puso sus labios contra los míos.

Otra vez... pensé mientras mi mente se perdía rápidamente en su tacto.

Los sonidos del hospital habían desaparecido completamente y solo podía sentir su respiración agitada entre un beso y otro, mi corazón latía tan rápido y fuerte que parecía salirse de mí.

-Si no lo haces...-Intente hablar aunque estaba tan agitada que me costaba.

-¿Si no hago qué?.- Pregunto alejándose de mí y tomando con fuerza mi cintura.

Trague saliva y lo observé a los ojos.

-Si no...-Dije un poco perdida a la vez que la puerta se abría sin más, dejándonos inmóviles a los dos.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 19, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Raíces Demoníacas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora