Amigos

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No volvió a ver a su compañero de asiento hasta la semana siguiente. Por lo que supo después por los susurros en los pasillos, todos los involucrados excepto él fueron llamados a la oficina después del altercado, incluído el segundo jade y el más joven de los Nie. A él se le pidió ir más tarde, cuando sus madre y su tía  habían llegado. Mentiría si dijese que recordaba algo de lo que pasó porque no lo hacía. Tenía tanto miedo de arruinarlo todo, así que dejó que sus labios se movieran en automático, relatando lo que pasó antes de que Wei Ying lo salvase, lo que resultó en la casi expulsión de su primo y la cancelación de la expulsión de Wei Ying.

Recuerda vagamente los gritos de la tía Mo y también los de su madre, algo que no mentiría que lo impresionó. Su madre era una mujer baja y menuda, siempre tranquila y amorosa, nunca, por lo que recordaba, se había atrevido a gritarle a su hermana mayor, no hasta hoy, que supo las cosas que su primo le hacía, según su madre por la influencia de la tía Mo, siempre expresándose mal de ellos, siempre insultando a su madre por su origen, algo que empeoró después de que el abuelo les dejase la mitad de su herencia a él y a su mamá.

Se detuvieron hasta que los otros padres de familia llegaron. No supo más pues le dejaron ir por sus cosas, pasar nuevamente a la enfermería e irse con su mamá. Su madre lo consoló y lo llevó a comer a su restaurante favorito. Estaba triste y molesta, pero sobre todo se sentía culpable. Entró en pánico cuando comenzó a llorar y a pedirle perdón por no prestarle atención, aunque ella no tuviese la culpa de nada. Intentó ocultar sus problemas con tal de que mamá no se preocupara, pero eso al parecer la hacia preocuparse más.

Ahora decía estar mejor, la tranquilizaba saber que tenía amigos que lo cuidaban y se preocupaban por él. No quiso corregirla, no quería hacerla sentir más mal haciéndole saber que no tenía amigos, que ellos no eran sus amigos, eran... No sabía que eran, Wei Ying siempre intentó hablarle en clases, pero su miedo le pudo más, irónico pues el estudiante más ¿sanguinario? (ahora lo dudaba) y temido lo había salvado de su propio primo, y los demás preferían no involucrarse en sus asuntos, o eso creyó. Se preguntó si el segundo jade habría hecho algo si desde secundaria hubiera hablado, si Jiang Cheng se arriesgaría a ir por un profesor como lo hizo en esta ocasión, si Nie Mingjue hubiera atrapado a los chicos que ayudaban a su primo a golpearlo, o si Nie Huaisang le hubiera ayudado a llegar a la enfermería cuando lo lastimaban. No lo sabrá jamás, pero se consolaba en pensar que si, que talvez lo hubieran ayudado.

Supo después que Wei Ying, su primo, A-Tong, A-Ding y los otros dos estudiantes fueron suspendidos por una semana por pelear dentro de la escuela, pero a Mo Ziyuan y a su grupito les dieron un mes de castigo limpiando los baños de primer año, además de tener que ir a terapia, al igual que él, y llevar el comprobante de su asistencia al director semanalmente. Daba miedo como todo parecía tomar su lugar. Ya no más golpes, amenazas, destrozos a sus libretas de dibujo, quedarse sin dinero o sin comida. Wei Ying lo salvo. Si, su salvador, así es como podía nombrar a Wei Ying.

El inicio de semana siguiente empezó con el susto que sus compañeros se llevaron al llegar y encontrar a Wei Ying en su asiento, mirando hacia la ventana. Ninguno se atrevía a entrar, pero el hechizo se rompió cuando Jiang Cheng, que también ya se encontraba en su lugar, perdió la paciencia.
-Por dios, dejen de actuar como idiotas, es un humano, no un monstruo.
Nie Huaisang fue el primero en entrar , convenciendo a entrar al resto cuando dijo que el profesor Shen le pisaba los talones.

Entraron en manada, él prefirió esperar hasta que no lo aplastaran por intentar no llegar tarde a clases. Se sentó y acomodó su mochila. Se sentía tímido, no sabía si saludar al chico y agradecerle por lo que hizo o quedarse callado para no molestarlo. Pareció no notarlo, su mirada aún en la ventana. No hablaron en toda la clase ni en las tres siguientes. Eso lo desanimó un poco. Probablemente el chico solo se había acercado y golpeado a su primo por algún otro motivo aislado a él, no por haberse preocupado por un insignificante como él.

The Legend Of Yiling LaozuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora