I can hear his name.

25 3 0
                                    

<<Dios, ¿Cuándo tome tanto?>> Es lo primero que pienso al abrir mis ojos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

<<Dios, ¿Cuándo tome tanto?>> Es lo primero que pienso al abrir mis ojos. Cuando mi cabeza bombea, mis ojos arden, mis extremidades se sienten pesadas y mi cuerpo por completo duele. Momento mas tarde me doy cuenta que lo que siento no es una simple resaca, pues los recuerdos invaden mi cabeza de golpe.

- Hasta que por fin despiertas. Estaba a punto de pensar que estabas muerta o que caíste en coma - lo primero que mis oídos escuchan es la voz de Detroit.

Me tomo un momento para observar donde estoy. Al instante en que noto mi habitación suelto un suspiro. Voy con el vestido blanco que llevaba ayer, pero este tiene manchas de sangre, lodo, esta mojado y no huele particularmente bien.

El sol que entra por la ventana provoca el doble de dolor en mi cabeza.

-¿Que fue lo que ocurrió? ¿Cómo termine acá? - Pregunto mas para mi que para Detroit, pero igualmente se toma el tiempo de responder mis dudas.

-Ayer en la noche salía de mi entreno de Basketball, cuando tus amiguitos me llamaron. Estaban solos en la mitad de la nada, sucios y con los rostros enmarcados en pánico. El que tiene rizos te llevaba en brazos. Sophie me dijo que fueron a ver una mansión y del pánico desmayaste. Es lo único que se.  - Exclama demasiado despreocupado, como si fuese lo mas normal del mundo - Te traje hasta acá. Pero lastimosamente Indiana vio en la situación que estabas, intente explicarle pero no creyó y asegura que estabas de fiesta o algo similar. Así que, supongo que te esperará un buen regaño. - Termina el relato levantándose de mi alfombra.

Llevo mi mano a mi cabeza. Esto no puede estar pasando. De por si tenia problemas con Indiana, ahora serán el doble.

-Ah y tu amigo el japonés esta en la clínica. Te dejaron un mensaje y estaba lo suficiente aburrido como para mirar tu celular. -Habla en la puerta, alarmándome por completo. ¿Sean en la clínica? ¿Qué ocurrió? Se que el golpe de la viga, pero ya estaba mejor o al menos eso pensamos.

-Espera, espera. ¿En que clínica esta? - exclamo levantándome de la cama con la voz mas ronca de lo normal.

-Mmm... creo que la central privada, no lo se- responde mirando su teléfono.

-¿Podrías por favor llevarme? Por favor, por favor... - susurro sosteniendo su brazo y poniendo carita de perrito.

-Voy tarde al entreno, además debo pasar por Lizzy - responde rodando los ojos.

-¿En serio dejaras tirada a tu hermana, con la que compartiste vientre, por ir con una chica que no te quiere? Me dueles Detroit - exclamo haciendo drama, de verdad necesito llegar a esa clínica de alguna forma. Y también es cierto que Lizzy no lo quiere, solo le interesa su apellido aunque tampoco es como si el la quisiera, pero eso ya no es asunto mío.

-Báñate y péinate primero, de verdad que luces horrible. - exclama rodando los ojos y aceptando. No importa que tan odioso o rebelde sea Detroit, siempre me ayuda, me busca o esta de mi lado así yo no tenga la razón.

Respira un poco mas fuerte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora