Amantes de Negro || LS

Capítulo 2

NT/A:

Cuando vean un asterisco |*| es porque es una palabra rara y al final del capítulo está su significado.

De paso, no se olviden de comentar por favor.

...

El final de la semana llega más rápido de lo que esperaba, pronto ya es un viernes por la noche. El esposo de Harry, Mike había salido con otros omegas como acostumbraba a hacer cada viernes, su hija estaba en su habitación, mientras fingía dormir cada que iba a verle y Leon hace rato había salido con unos amigos. Así que sí, el único en su casa y sin nada para hacer era Harry.

Era muy lamentable para él tener que admitir que aquello era algo típico, sus tres omegas salían muchísimo, porque hasta Habby tenía amigas con las cuál salir.

Mentía diciendo que los viernes amaba descansar haciendo nada, decía también que era su momento de vagancia después de tanto trabajo, así que por eso no le gustaba salir. Pero, al fin y al cabo, era mentira, le gustaría poder salir y tratar de divertirse, tener otras cosas en las que pensar y dejar de creer que ha desperdiciado toda su juventud, por eso le toca vivir reprimido en su adultez.

Había sido una semana extremadamente cansada.

A pesar de que el lunes no fue tan pesado, los demás días tuvo demasiado trabajo. Tenía que hacer correcciones de pruebas a sus estudiantes y, por si fuera poco, muchísimos omegas fueron a consulta, triplicando su trabajo.

Liam no le había dicho nada raro de la empresa, así que por esa parte no se preocupó. No lo hacía, realmente.

Trataba de distraer su mente en otras cosas, como ver televisión, o leer algún libro. Así que ahí estaba, en su recamara mirando un programa de dos hermanos que remodelan casas para venderlas, estaba bastante entretenido, debía admitir.

Aquello lo distrajo por suficiente tiempo, hasta que se decidió por ir a su oficina y leer algún libro de salud para omegas y de allí organizar los nuevos temas para dar a sus alumnos. No le tomó tanto tiempo, lamentablemente, por lo que otra vez estaba sin nada que hacer. Revisó documentos administrativos del hospital (fingiendo interés), se tomó el tiempo de leer las sugerencias anónimas y no anónimas que dejaban las personas, mientras hacía anotaciones sobre las que cree que son beneficiosas.

En medio de todo aquello, es interrumpido por el sonido de notificación de su celular. Salta en su lugar, sorprendido por el inesperado tono.

Su teléfono personal está cerca, entonces lo toma y observa la pantalla. Es Liam, se percata.

Liam Payne

Harreey, ¿Qué hay? ¿Aburrido en viernes? Sé que si hermano, no me tienes que responder. Bueno, ¿Qué tal si tú y yo nos vamos a un bar? Algunas bebidas, charlas para matar el tiempo. No te digo que omegas porque estás casado, a menos que tú... Bueno, como sea, dime que piensas de ello.

Rueda los ojos para sí y con un suspiro, mientras se acomoda mejor en su sillón piensa sobre aquella propuesta. No le toma mucho tiempo decidirse, claramente.

Va casi en automático hacía la habitación de Habby para asegurarse que esté realmente bien.

Al entrar, la pequeña está durmiendo profundamente (sabe que ahora sí lo está porque conoce demasiado a su hija, a ambos) con su teléfono a un lado y ambas luces de las mesas de noche prendidas. Se acerca lo suficiente hasta tomar el celular con cuidado y ponerlo a cargar en una de las mesas, arropa hasta el tope su pequeño cuerpo, apaga ambas lámparas y se retira luego de dejar un beso en su frente.